¡164 víctimas en todo el mundo! Esta es la sombría evaluación del informe de la ONG británica Global Witness sobre los asesinatos de activistas ecologistas y de derechos humanos en 2018, con 43 víctimas, la minería es el sector industrial más mortífero.

En Filipinas, por ejemplo, el Dr. Benito Molino lucha por la protección del medio ambiente y contra la minería de níquel. Ha sentido la violencia de la industria minera y ha recibido amenazas de muerte en su smartphone.

La industria alemana es uno de los principales consumidores de materias primas del mundo. El níquel de Filipinas termina en los coches o en el acero «made in Germany». Sin embargo, la minería viola masivamente los derechos humanos y destruye el medio ambiente.

Alemania es el quinto mayor importador de materias primas del mundo. Por lo tanto, los políticos y la industria tienen una gran responsabilidad en el cumplimiento de los derechos humanos y la protección del medio ambiente en las cadenas de suministro mundiales.

Pero las cadenas de suministro son intransparentes. En 2017, PowerShift quería seguir el camino del níquel con sus socios. Sin embargo, ThyssenKrupp, Volkswagen y otras empresas no revelan ninguna información sobre si el níquel de sus productos es inofensivo para los derechos humanos.

El informe Global Witness obliga a actuar. En la actualidad, el Ministerio de Economía y la Cancillería no están incorporando las normas para la protección del medio ambiente y los derechos humanos en las cadenas mundiales de suministro en la revisión de la estrategia alemana de materias primas.

Y los ministerios alemanes siguen frenando el Plan de Acción Nacional para las Empresas y los Derechos Humanos. Más información en el programa Monitor – Fraude de derechos humanos: Cómo Alemania está frenando las normas de la ONU.

Nico Beckert

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Traducción del alemén por Sofía Guevara

El artículo original se puede leer aquí