Cientos de estudiantes secundarios se manifestaron hoy, el día en que comenzó el año escolar, como una forma de solidarizar con sus compañeros de aula expulsados por participar en actos de protesta durante el año pasado.

Once alumnas del liceo Carmela Carvajal se encadenaron frente a la puerta de las instalaciones educacionales, exigiendo explicaciones por el hecho de que no les fueran renovadas sus matrículas.

Las marchas entre tanto llegaron hasta la Municipalidad de Providencia, cuyas autoridades dejaron sin sus matrículas a decenas de alumnos de liceos que estuvieron tomados el año 2011 como reclamo por cambios estructurales en el modelo educacional chileno.

La representante de la Organización de Padres y Apoderados, Valentina Campos, dijo que los menores expulsados no han cometido ningún delito, no son delincuentes y deberían dejarles reingresar en sus escuelas.