La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, encabezó ayer el acto «En Barcelona el amor gana al odio», al que asistieron más de 400 personas según datos de la guardia urbana, como respuesta a la concentración, que en otro punto de la ciudad, celebraba el partido de extrema derecha «VOX».
El acto, con un fuerte tono festivo, contó con la presencia de representantes del colectivo LGBTI, así como de quiénes están sensibilizados con los problemas de los migrantes. La alcaldesa invitó a los asistentes a salir a las calles y celebrar la vida en días en que la gente triste que odia, quiere contagiarnos sus pasiones tristes.
Gente no muy conocida pasó por la tarima mostrado su talento e inspiración. También su compromiso social a favor de la diversidad en un mundo cada vez más acelerado y globalizado. Una correntada de energía positiva recorrió el público.