Pressenza participó en el encuentro organizado el domingo 17 de febrero en la Plaza de la República en París, para apoyar a Mediapart tras las revelaciones sobre el caso de Alexandre Benalla.
En un estado de derecho democrático, cualquier intento de ejercer presión a los medios de comunicación por parte de los tribunales o las autoridades públicas o privadas, es inadmisible. La prensa tiene un papel vital dentro de una verdadera democracia y debe poder transmitir información de manera imparcial.
El caso Mediapart
Tras la publicación de las grabaciones de Alexander Benalla, Mediapart fue objeto de un intento de registro para requisar dicho material y la fiscalía abrió una investigación, especialmente por el caso de invasión a la privacidad. Según algunas fuentes, esta investigación preliminar por «invasión a la privacidad» se inició después de que Matignon envió varios elementos a las instancias judiciales.
En una democracia, la justicia debe garantizar que se respete la confidencialidad de las fuentes, y el gobierno no debe tomar acciones ocultas que puedan afectar nuestra libertad de información.
La libertad de prensa, los derechos humanos y la ley
Es necesario aclarar que el artículo 11 de la Declaración francesa de los derechos del hombre y del ciudadano de 1789 establece: «La libre comunicación del pensamiento y de las opiniones es uno de los derechos más preciados del hombre; todo ciudadano puede, por tanto, hablar, escribir e imprimir igualmente, salvo la responsabilidad que el abuso de esta libertad produzca en los casos determinados por la ley».
La Ley No. 2010-1, del 4 de enero de 2010, sobre la prohibición de la revelación de las fuentes de los periodistas, que modifica la ley de 29 de julio de 1881 sobre la libertad de prensa, ha aclarado esta cuestión. Así, el artículo 2 es restablecido: «Solo es posible vulnerar directa o indirectamente la prohibición de la revelación de las fuentes si un imperativo preponderante de interés público lo justifica y si las medidas previstas son estrictamente necesarias y proporcionadas al objetivo legítimo perseguido. Esta vulneración no puede en ningún caso ser una obligación para el periodista de revelar sus fuentes.” (1)
Nos gustaría enfatizar que Pressenza es una agencia de noticias internacional, fuertemente comprometida con la defensa de la independencia y la libertad de prensa en el mundo. Consideramos que la libertad de expresión e información es la primera de las libertades.
(1) www.legifrance.gouv.fr
Traducido del francés por Rosalía Briones