El vicepresidente de Bolivia Álvaro García Linera, afirmó el viernes por la noche que la desigualdad no solo es un tema de números porque en el fondo se trata de un sufrimiento humano que tiene rostro, nombre e historia.
García Linera hizo esa reflexión en su exposición en el seminario internacional «Desigualdad en el mundo 2018», que se desarrolló en el hall de la vicepresidencia y en el que disertó la experta en la lucha contra la desigualdad, Winnie Byanyima.
«El tema de la desigualdad no es solo un tema de números, es un tema de sufrimiento humano que tiene rostro, nombre e historia (…) y el enfoque contra la desigualdad debe estar marcado por esa mirada humana del sufrimiento porque este su contenido humano es la clave para tener un enfoque diverso, multisectorial, y cuando uno tiene ese enfoque también tiene una forma de comprometerse en la lucha contra ella», aseveró citado en un boletín institucional.
El segundo del Ejecutivo afirmó que las desigualdades atraviesan la vida económica, laboral, política, jurídica, familiar, comunicacional, «todo el ámbito de la vida cotidiana está marcada por desigualdades y la dignidad humana se presenta cuando uno se plantea combatir esas desigualdades, detectarlas, enfrentarlas y buscar superarlas», añadió.
En su disertación García Linera comentó respecto a algunos logros alanzados por Bolivia en la reducción de desigualdades, aunque reconoció que queda mucho por hacer, pero se redujo la diferencia entre los más ricos y los más pobres de 128 veces a 46; el 30 % de la población ha pasado a la clase media de consumo, se han mejorado notablemente el salario mínimo, «Bolivia es el país que más invierte en educación y se incrementó la inversión en salud».
«La desigualdad es un hecho lacerante de la realidad moderna y Winnie Byanyima nos pide que tengamos una mirada multidiversa de la desigualdad (…) las relaciones de desigualdad en los Estados, en las economías internas, en las relaciones laborales, el acceso a los bienes, a los conocimientos para poder producir; nos pide que nos fijemos en las desigualdades al interior del mundo laboral entre hombres y mujeres y habría que añadir entre hombres y mujeres indígenas y no indígenas», agregó.
García Linera, dijo que se debe analizar cómo reducir las desigualdades en la toma de decisiones, pues alguien que tiene mucho dinero no puede incursionar en la política, igualmente, pidió que se revisen las desigualdades en el sistema de justicia y en la construcción de opinión pública, ahora que las personas son tomadas como «bolsas de datos» aprovechadas por los algoritmos lanzados por las grandes empresas para obtener información a usarse comercialmente.
«También nos convoca a ver las desigualdades al interior de la familia, el sistema de familia en crisis es un lugar de control de la capacidad procreativa de la mujer, de la capacidad emotiva, laboral e intelectiva de la mujer», señaló.
Recordó que en los años 80 y 90 se hizo creer que las desigualdades desaparecían con la globalización, el libre mercado y la democracia representativa, y no era un tema relevante, además, se decía que si existían era porque los pueblos no se habían dado cuenta de que debían superarlas y que tenían que llegar inevitablemente a ese fin del destino.
Por su parte, Winnie Byanyima se refirió a la acumulación excesiva de riqueza en el mundo, a que se vive una era de consumo exagerada, se presenta una elevada deserción escolar, especialmente de las mujeres y remarcó que América Latina es una de las regiones con mayores índices de desigualdad en el mundo, aunque ha conseguido grandes logros en el tiempo de los gobiernos progresistas, pero estos se encuentran en peligro, por lo que instó a erradicar al neoliberalismo y buscar una economía humanista que trabaja para todos.
Siempre según la nota de prensa, Byanyima destacó el liderazgo de Bolivia en la aplicación de medidas que han permitido un crecimiento destacado de la economía, la reducción de la pobreza, el respeto de los derechos de las mujeres, la reducción de las desigualdades entre géneros, entre otras.
«Estoy complacida de los esfuerzos que hace este país para establecer ejemplos en este debate mundial, hay tanto potencial en este país para alcanzar una transformación mundial para reducir las desigualdades económicas y de género (…) andemos y luchemos brazo a brazo con las comunidades indígenas, con las mujeres y organizaciones de mujeres y gente que lucha por los derechos humanos», enfatizó.
Winnie Byanyima, directora ejecutiva de Oxfam Internacional, es defensora de los derechos humanos, líder mundial de los derechos de las mujeres y autoridad global en desigualdad económica.