En 2004, el hijo de la primera ministra en ese entonces, Khaleda Zia y otras 48 personas atentaron contra quienes participaban de un mitin de quien ahora gobierna Bangladés, Sheikh Hasina.
El intento de asesinato contra la dirigente de oposición en 2004 y en el poder desde 2008, le costó la vida a 20 personas que murieron por las explosiones causadas por el lanzamiento de granadas contra la multitud.
Tarique Rahman, de 50 años, fue hallado uno de los máximos responsables del sangriento suceso, en el que hirieron a Hasina en la oreja, el 21 de agosto de 2004, en la capital del país, Daca.
Rahman, el hijo de Zia, huyó del país, cuando cambió de mando el gobierno en 2008 y continúa conduciendo la oposición desde Londres, donde reside. Su madre fue condenada a cinco años de cárcel en febrero y desde entonces se ha convertido en el principal líder del Partido Nacionalista de Bangladés.
Hasina y Zia, dirigentes históricas de la independencia del país, fueron aliadas en los años ochenta, hasta que a partir de los noventa su relación se volvió violenta.
Además de Rahman, otras 19 personas fueron condenadas a muerte, entre los que se encuentran dos exministros.