Colombianos y colombianas residentes en la Argentina se reunieron frente al Consulado de Colombia en Buenos Aires, para repudiar la ola de asesinatos de líderes y lideresas sociales y exigir al Estado colombiano el cumplimiento de los acuerdos de Paz.

También se realizó la velatón por la vida en ciudades como La Plata, Mendoza, Córdoba y Tucumán.

La comunidad colombiana en el país entregaron una carta denunciando la crisis humanitaria e hicieron un llamamiento por la paz  y el cuidado de la vida.

Lxs colombianxs residentes en Buenos Aires, Argentina se unieron a la #VelatónPorLaVida y al clamor por los líderes y lideresas sociales asesinados. #SiALaPaz #SiALaJEP Vía Edison BUrbano.

Posted by Continentes y Contenidos Radio H on Saturday, 7 July 2018

Compartimos el texto de la citada carta :
#NosEstánMatando

Buenos Aires, 6 de julio de 2018

Desde hace más de cinco años, el pueblo colombiano viene luchando para que el objetivo de la paz se haga realidad. Una negociación convertida en acuerdo se vislumbraba como uno de los pasos más trascendentales para el final de una guerra que ha desangrado este país. Sin embargo, el gobierno entrante ha abanderado como proyecto político la desvirtuación de ese acuerdo firmado. El discurso hegemónico ha hecho aparecer a las FARC como el actor en armas generador del mayor caudal de violencia en Colombia. Pero la realidad actual pone en evidencia dos dramáticas verdades que han querido ser ocultadas: la reorganización del paramilitarismo y el terrorismo de Estado.

A pesar de la firma de los acuerdos, la persecución a los defensores de la paz no ha cesado. En lo que va del año 2018, más de 100 líderes y lideresas sociales han sido asesinados en Colombia, y las amenazas propinadas por grupos organizados (tales como las Águilas Negras) vienen en crecimiento. Los grupos paramilitares parecen haber encontrado un escenario propicio para reconfigurarse en los territorios gracias a la recomposición política del uribismo que se propinó tres triunfos electorales en los últimos tiempos: El NO a la paz en el plebiscito, los resultados electorales de Álvaro Uribe como candidato a senador y el triunfo de Iván Duque como nuevo presidente de Colombia. El discurso reivindicador de la guerra que han agitado desde la tribuna política se ha convertido en escenario para el crecimiento de la violencia desmedida a la que asiste actualmente Colombia.

El Ministro de Defensa aún en funciones, Luis Carlos Villegas, ante la denuncia por parte de organizaciones de derechos humanos sobre los asesinatos de líderes y lideresas sociales en las regiones, sostuvo que la inmensa mayoría de los casos se trataba de un pleito por linderos, de un tema de faldas y de peleas por rentas ilícitas, y aseguró que no hay una organización o sistematicidad detrás del asesinato a líderes sociales. Las declaraciones del ministro confirman la falta de respuesta del Estado y banalización de la brutal situación.

Las personas y organizaciones abajo firmantes denunciamos, con profunda preocupación, la existencia de una crisis humanitaria en Colombia. Como parte de la comunidad internacional manifestamos que los hechos evidencian un plan sistemático de aniquilamiento y amenaza selectiva contra defensores/as de derechos humanos, líderes y lideresas sociales, campesinxs y referentes territoriales de las fuerzas políticas de oposición. La sistematicidad y selectividad de los asesinatos indican la existencia de una acción planificada y organizada. La falta de garantías de protección a los derechos fundamentales en Colombia se agrava cada vez más a causa del silencio de los medios de comunicación masivos y la ausencia de acciones por parte del Estado.

Manifestamos nuestro rechazo al asesinato sistemático de líderes y lideresas sociales en Colombia. Los hombres y las mujeres que todos los días luchan por el derecho a vivir y recuperar sus territorios, porque se respeten los recursos naturales, por la defensa de la paz, la justicia social y el derecho a la vida, no pueden seguir siendo masacrados ante la mirada indiferente del Estado colombiano, cuyo deber es proteger la integridad de todos sus habitantes sin distinción de clase, género, raza o ideología.

Colombianos y colombianas, organismos de derechos humanos, organizaciones sociales, políticas y sindicales en Argentina, exigimos al gobierno nacional de la República de Colombia y a sus instituciones judiciales, a los organismos de protección internacional de DDHH, que investiguen a fondo los asesinatos, que garanticen efectivamente el resguardo a la vida de aquellos líderes y lideresas, defensoras y defensores de DDHH que han sido amenazadas y se encuentran desprotegidas en sus territorio; y tomen todas las medidas necesarias para frenar el accionar de todo tipo de organización armada que actúe al margen de la ley.