En Washington DC, casi 600 mujeres fueron arrestadas el jueves durante una acción masiva de desobediencia civil no violenta en el Capitolio, en protesta por las políticas en materia de inmigración implementadas por el gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Se observaron manifestantes que gritaban “nos importa” y “abolir el ICE [sigla en inglés del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas]” y que portaban mantas de emergencia de poliéster similares a las que se entregan a los inmigrantes que se encuentran encarcelados en los centros de detención a lo largo de Estados Unidos. Las manifestantes inundaron el edificio Hart del Senado para hacer una sentada con el fin de exigir que los menores inmigrantes sean liberados de la custodia estadounidense y sean reunidos con sus familias. Entre las manifestantes se encontraba Linda Sarsour, coorganizadora de la Marcha de las Mujeres en Washington, realizada el 21 de enero de 2017 en la capital estadounidense para defender los derechos de las mujeres.
Linda Sarsour declaró: “A la luz de los momentos oscuros que vivimos en este país, con niños que han sido arrancados de los brazos de sus padres, los fallos de la Corte Suprema sobre la prohibición musulmana y sobre las clínicas antiabortistas, la represión contra los trabajadores, el retiro del magistrado [Anthony] Kennedy, y tener que pensar cómo será nuestra Corte Suprema en los próximos 30 o 40 años, me siento inspirada. Me siento inspirada por las mujeres de todo el país que vinieron aquí, arriesgándose a ser arrestadas, para decir: ‘No nos vamos a quedar sentadas mientras ocurren estas injusticias’. Así que el mundo está bastante mal, pero me siento esperanzada e inspirada”.