Esta tarde tuvo lugar en Santiago de Chile la sesión inaugural del Festival Mente, Cuerpo y Alma, bajo el lema: «Viviendo el Gran Cambio» en la Sala de las Artes del Centro Cultural Estación Mapocho, con una charla del humanista Tomás Hirsch al respecto.

Comenzando con su testimonio personal respecto de las preguntas existenciales que se formulara en su adolescencia, el vocero del humanismo pasó a dar contextos respecto de la creciente violencia que se viene experimentando en el mundo en todos los aspectos: no sólo la violencia física, el armamentismo y las guerras, el peligro nuclear y ambiental, sino también la marginación y discriminación crecientes.

«Pero hoy el mundo cambió», señaló Hirsch. «Nuevos valores y una nueva espiritualidad están emergiendo ante este mundo deshumanizado. Las nuevas generaciones han despertado y se movilizan con esperanza desde El Cairo a Madrid, Tel Aviv, Nueva York, Estambul, Santiago y Río de Janeiro, así como tantas otras ciudades en las que nos hacen ver que algo muy nuevo está naciendo. Una demanda por justicia social, por igualdad, un cambio de conciencia que va creciendo: conciencia ecológica, conciencia de los derechos humanos, conciencia de un progreso que tiene que ser para todos y se va expresando en todo el planeta».

Tomy en MCA

«Pero tal vez lo más relevante de esta nueva conciencia», agregó, «es su marcado rechazo a la violencia. Se empieza a comprender que la no-violencia activa es la única metodología de cambio verdadero, al tiempo que un creciente sentimiento de repulsión y rechazo hacia toda forma de violencia va surgiendo. Ello nos permite aseverar que este gran cambio no es sólo social, sino que va aparejado a un cambio muy profundo que anida ya en nuestra especie, este ser humano tan joven, tan reciente, que se anima a dar curso a una nueva espiritual sin intermediarios y va tomando contacto con la profundidad de su conciencia».

Para terminar, Hirsch dijo: «El Gran Cambio es sobretodo un cambio de conciencia humana que nos lleva a comprender que lo personal y lo social están indisolublemente vinculados y su transformación es simultánea; que aquello que da sentido a la vida es Humanizar la Tierra, superando el dolor y el sufrimiento en uno y colaborando para que también retroceda en los demás».

 Tomás entre luces

Fotos de Micky Hirsch