Según un comunicado de prensa fechado el 25 de abril de 2018, la organización internacional de ayuda Médicos sin Fronteras, MSF, condena los ataques aéreos contra una boda en una aldea remota del distrito de Bani, en Yemen. Se dice que los ataques tuvieron lugar alrededor de las 11 de la noche del domingo pasado. Al menos 20 personas habrían muerto y varias habrían resultado heridas. Se estima que se registrarán más muertes. Entre las víctimas hay varios niños.

Violación grave del derecho internacional

Según la organización de ayuda, 63 heridos fueron atendidos en el hospital de Hajah tras el ataque. Según João Martins, coordinador de MSF en Yemen, 13 de los heridos eran niños, lo que es «escandaloso». «Los ataques contra civiles son una grave violación del derecho internacional. La gente llegaba al hospital vestida de fiesta, que tradicionalmente se usa en las bodas. Nadie iba armado ni llegó con uniforme militar», cita MSF Martins.

Muchos habrían perdido miembros. «Al menos tres pacientes necesitaban una amputación, incluyendo dos hermanos que perdieron un pie. Muchos habitantes de Hajah vinieron al hospital para donar sangre. En un plazo de dos horas, se donó suficiente para 150 bolsas de sangre para tratar a los heridos», continúa la organización de ayuda.

Mucha sangre y niños muertos

«Estaba en la tienda de la boda cuando oí los ataques aéreos. Después de eso me caí y perdí el conocimiento», cita MSF a Kamal, de 12 años. «Cuando me desperté, vi a la gente salir corriendo de la tienda. Uno de mis primos murió en el ataque.»

Se dice que otro testigo informó de que había salido de la tienda 20 minutos antes del ataque. El suelo estaba lleno de cadáveres y sangre, los niños buscaban desesperadamente a sus padres. «Entre los muertos había niños. Estaban jugando afuera mientras sus padres celebraban en carpas. Luego vino el «ataque». Muchas mujeres y niños de la aldea se sienten traumatizados y no saben qué pasó con sus familiares.

Serie de ataques

Los ataques se llevaron a cabo con varias series de aviones de la coalición militar encabezada por Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos, por lo que los primeros en responder y dos ambulancias sólo pudieron llegar tarde. El primer paciente llegó al hospital hacia medianoche, dijo MSF.

Según el coordinador de país Martins, las reglas de la guerra en Yemen están siendo violadas constantemente. Todas las partes en el conflicto tendrían que «comprometerse a proteger a la población civil. Y todas las partes que alimentan el conflicto con la venta de armas deben asumir sus responsabilidades y asegurar que se respete el derecho internacional para proteger a la población civil».

La Monarquía del Golfo ha estado librando una guerra contra los rebeldes Huuthi apoyados por Irán en el vecino Yemen desde 2015 sin un mandato de la ONU, pero con el apoyo de Occidente. La monarquía absoluta es también un aliado cercano y un cliente leal de las empresas armamentistas occidentales y alemanas.

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