Conversamos con Ismael Melo desde Tegucigalpa, el director de Radio Progreso para que nos ayude a entender lo que pasa en Honduras. Un presidente que asume en toda ilegitimidad, manifestaciones en todo el país, una militarización nunca vista de las calles hondureñas y el Partido Libre declarado en Insurrección Total. ¿Cómo seguirá la película de Honduras?
Melo, gracias por estar con nosotros, queremos que nos expliques como es que Juan Orlando Hernández logra ratificarse y asumir de nuevo la presidencia de Honduras, hazle una breve síntesis a nuestra audiencia, ¿qué pasó en estos dos meses?
Mira, estos dos meses desde el 26 de noviembre hasta esta fecha en la que tú y yo estamos aquí en tertulia, lo que hemos vivido es una especie de escenario de transición, caracterizado por un proceso intenso de blanqueo del fraude electoral. Aquellas elecciones que el propio Juan Orlando Hernández sabe perfectamente que las perdió y que el propio gobierno de los estados Unidos sabe perfectamente que reconoció a un presidente que no fue electo por la voluntad mayoritaria del pueblo. Juan Orlando Hernández se dedicó en estos dos meses a blanquear el fraude electoral a través de, primero el reconocimiento del gobierno de los Estados Unidos, del Departamento de Estado, el 22 de diciembre. Fue tajante que el reconociera como único ganador a Juan Orlando Hernández.
Después también hubo un achicamiento de la palabra que había tenido hasta este momento la Misión de la Unión Europea y después, un largo silencio por parte del secretario de la OEA, después de que el 17 de diciembre había dicho que los resultados electorales no podían ser fiables por la irregularidad del proceso y porque había problemas sistémicos. Y luego entró otro asunto y fue el brusco llamado al dialogo nacional, que ha sido la plataforma a través de la cual se ha ido haciendo creer que vamos a resolver los asuntos a partir de entendernos entre nosotros, pero sin tocar las cosas de fondo. Pero en los hechos, desde el 27 de noviembre hasta la fecha, lo que hemos tenido es más, mucho más de 30 personas asesinadas y de acuerdo a informes internacionales acreditados como, por ejemplo del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, al menos 15 de las personas asesinadas fueron por balas directas de la policía militar del orden público, que es el cuerpo armado que recibe ordenes estrictas y directas de Juan Orlando Hernández. Hemos tenido cerca de 1500 personas golpeadas, torturadas, macheteadas y tenemos más de 50 personas encarceladas, acusados de diversos delitos pero la única razón es haber participado en las manifestaciones, a la protesta social se le dio una respuesta militar.
Nunca en mi vida, el que te está hablando tiene 60 años golpeado y nunca en mi vida, yo he vivido la guerra en Nicaragua, en El Salvador y en Guatemala, pero nunca en mi vida he experimentado una militarización tan feroz y además una agresividad directa de parte del ejército y la policía militar del orden público en contra de los manifestantes. El propio vocero de las Fuerzas Armadas dijo lo siguiente: “el propósito de los manifestantes es crear terror y por lo tanto tenemos que responderles con fuerza”. Es decir, nos han atacado como a terroristas, hoy después de esto el 27 de enero tomó posesión el régimen y se inició lo que nosotros llamamos la etapa del autoritarismo dictatorial. Con un control absoluto por parte de Juan Orlando Hernández y su equipo con el aval del gobierno de Estados Unidos, al menos con el silencio europeo, con una palabra bastante mediocre de parte de la OEA. Y entonces esa etapa es lo que yo puedo llamar la terrible etapa de la ingobernabilidad y esto te lo digo porque como tú sabes un Estado tiene que basarse como en dos grandes pilares: la búsqueda de consensos y la coerción.
Pues este gobierno ilegítimo, es ilegal y por lo tanto es usurpador y perdió toda capacidad para proponer propuestas que se conviertan en consensos, no hay posibilidad de consensos, por lo tanto solo queda un pilar y es la coerción, la fuerza, el militarismo, la represión y eso se llama ingobernabilidad.
Melo, justamente siguiendo esta línea de tu reflexión, la última parte de tu respuesta, el movimiento y las organizaciones y toda a gente, el pueblo hondureño que se ha movilizado fuertemente durante estos dos meses, ha sido crudamente, cruelmente, reprimido, ¿cuál es en este momento la capacidad, la posibilidad que tiene realmente la organización, el pueblo organizado, los movimientos sociales de sostener una resistencia? ¿Cómo tú ves en este momento y hacia adelante esa posibilidad?
Yo te puedo decir con honradez que el régimen autoritario de la dictadura de Juan Orlando Hernández ha logrado la “Pacificación de la sociedad” y no es para menos. Si yo voy a una manifestación en estos momentos sé que no me espera solamente un gas lacrimógeno, sino que me esperan balas vivas, eso es generador de un ambiente de miedo, por lo tanto se ha agazapado en estos momentos la resistencia, hay una especie de repliegue, pero no significa que ha desaparecido. Al contrario, el repudio y el ambiente de indignación es todavía mayor y yo lo que creo es que, lo que te puedo asegurar, en política uno nunca puede decir la última palabra, pero lo que te puedo asegurar es que este régimen está en la imposibilidad de cumplir los 4 años. Porque su ilegitimidad, su ilegalidad y el absoluto repudio que hay en la sociedad hondureña va a convertirse, evidentemente, en una movilización activa y dinámica que va a llevar a que este gobierno no pueda gobernar, ¡imposible! Y, por lo tanto, que busquemos a mediano plazo, en el corto plazo estamos agazapados, pero a mediano plazo evidentemente van a haber alternativas que sin duda alguna van a resquebrajar este gobierno, que sin duda alguna es usurpador.
Tendría dos preguntitas, la primera tiene que ver con la oposición, o sea, hemos visto que el así mas o menos está dividido, de un lado está este gobierno ilegítimo, que tomó el poder con la fuerza y por otro lado hay la oposición. Entonces, quería saber, ¿cuál puede ser el rol de Nasralla y Zelaya, los líderes de la oposición y también si realmente esta oposición tiene una agenda que puede representar al pueblo hondureño?
Mira, el papel de Nasralla y de Mel Zelaya es de un importante liderazgo en el país y este liderazgo lo tuvieron de una manera protagónica hasta el 27 de enero. Y ahora lo siguen teniendo, sin embargo, hay otros liderazgos sociales que deben conjuntarse en una especie de alianza nacional opositora entre los partidos políticos que en este caso lideran Mel Zelaya y donde está Nasralla, junto con otras organizaciones de la sociedad, organizaciones populares, sociales, sindicales, campesinas, indígenas, juveniles, para que podamos conformar esa especie de lo que yo llamo “ciudadanía, activa y movilizada en oposición a la dictadura” y ahí es donde yo sitúo el liderazgo de la Nasralla y de Zelaya. ¿Por donde van los elementos en este momento? Yo digo de una manera clara y precisa: Primer lugar el tema de derechos humanos y que tiene que ver con demandar justicia y derechos humanos, tiene que ver con demandar que haya una investigación y un enjuiciamiento de los responsables de los asesinatos que han ocurrido a manifestantes en contra del fraude electoral concurrido del 27 de noviembre hasta la fecha. Porque esos son crímenes de lesa humanidad, primer lugar. De igual manera tiene que haber una lucha contra la inconstitucionalidad y en ese sentido se tiene que elevar la presión porque la candidatura de Juan Orlando Hernández fue ilegal y por lo tanto su inscripción por parte del Tribunal Supremo Electoral como candidato fue un delito. Y ese delito de traición a la patria es imprescriptible, por lo tanto por ahí tiene que ir la lucha en contra de la inconstitucionalidad. El otro elemento es exigir la desmilitarización de la seguridad pública, de igual manera tenemos que plantear que se retomen los hechos que conduzcan a identificar las redes de corrupción en donde están vinculados los altos funcionarios del gobierno actual, incluyendo el círculo más cercano a Juan Orlando Hernández, incluyéndolo a él mismo. Y luego, finalmente avanzar hacia la construcción de una propuesta de pacto social que a mediano plazo se convierta en la convocatoria de una asamblea nacional constituyente originaria para que no solamente redacte una nueva constitución, sino que redefina, refunda la sociedad hondureña, porque creo yo que esa ausencia de pacto social y esa ausencia de consensos es lo que si no se resuelve, nos va a llevar siempre a vivir en una crisis permanente y en un deterioro que solo daña a los sectores más empobrecidos hondureños.
Una última pregunta para cerrar la entrevista y justamente hablando de la fuerza que se movilizan en este gobierno ilegítimo, ¿qué pasa con los jóvenes? O sea, ellos tuvieron un rol muy importante en la coyuntura electoral y, ¿ahora se ha mantenido este rol?
Mira la Juventud es en este momento la fuerza más indignada que tenemos en la sociedad hondureña, yo diría que fueron los que protagonizaron las acciones más emblemáticas y hermosas a lo largo de estos dos meses de lucha contra el fraude electoral, con esa expresión que decían ellos: “ustedes se equivocaron de generación, se toparon con una generación que se equivocaron con ella” y ellos están cuestionando incluso los liderazgos clásicos que hay en Honduras y sin duda alguna, desde mi punto de vista, son los que están llamados por su propia realidad y por lo que han mostrado en estas semanas anteriores a ser los principales conductores y dinamizadores de las movilizaciones en repudio a la dictadura y con propuestas de reales alternativas para la sociedad hondureña, orientadas a recuperar el estado de derecho y la democracia.
Melo te agradecemos muchísimo por esta entrevista, seguimos muy preocupados por la situación en Honduras, con la situación de los líderes, de la gente que defiende derechos humanos, de la gente que se moviliza, con tu propia situación queremos manifestarte nuestra solidaridad, la solidaridad mía, la del equipo y también de Pressenza como Agencia, queremos decirte que puedes contar con nosotros para lo que podamos ser útiles en relación contigo, con cuidarte, con protegerte y también con la Radio Progreso y con todas las causas por los derechos humanos en Honduras en esta situación tan difícil.
Una de las manifestaciones de la solidaridad es tener de fondo la voz de Mario de Mezapa con esas canciones y teniéndolos a ustedes con esa voz tan cercana, que uno siente que está hablándole al oído, de oreja a oreja. Muchas gracias por invitarme a estar con ustedes.
