El Observatorio, un espacio de cooperación institucional conformado por la Autoridad de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA), el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI) y el Consejo Nacional de las Mujeres (CNM), informó que «este sentimiento de rechazo y desprecio puede en ocasiones llegar a la violencia física, la agresión y hasta el exterminio».
«Es habitual que en los medios de comunicación este colectivo sea objeto de burlas y chistes. Es importante recordar que la violencia física generalmente comienza con violencia verbal», dice el informe dado a conocer a propósito de celebrarse mañana el Día Internacional contra la Homofobia, Lesbofobia y Transfobia.
El informe explica que la discriminación es un conjunto de prácticas culturales de estigmatización y represión en función de las cuales se vulnera la igualdad de oportunidades, trato y resultados de distintos colectivos y sujetos sociales en función de la desigualdad y las diferencias que se atribuyen a los mismos.
El término «trans» (travestis, transexuales, transgénero) suele utilizarse para designar personas cuya identidad expresión de género difiere de la identidad de género o sexualización socialmente asignada.
«Se trata de un colectivo que ha sido históricamente excluido de las políticas públicas y es objeto de la violencia y abuso a los derechos humanos. Sufre especialmente la criminalización a través de los Códigos de Faltas y Contravencionales», dice el informe.
El Observatorio informó que recibió múltiples reclamos por los programas de televisión «Soñando por bailar» y «Gran Hermano 2011», por lo cual se realizó un informe que reveló «diversas expresiones homofóbicas y transfóbicas».
Además, «se vieron agresiones e insultos basándose en la identidad y expresión de género que fueron replicadas infinita cantidad de veces en otros programas», dice el informe.
El Observatorio manifestó su preocupación ante la falta de información, la espectacularización de la diversidad sexual y la banalización de los problemas propios del colectivo.
También se refirió con preocupación al uso de términos o construcciones gramaticales abiertamente discriminatorias como «puto», «maricón», el uso del masculino para referirse a travestis y personas trans), los estereotipos, la burla y la construcción de escenas de pánico moral y sexual.
El Observatorio considera necesario que «los/las periodistas y conductores/as tengan las herramientas para tratar esta temática de forma no discriminatoria e informada evitando la espectacularización y el trato que resulta discriminatorio».
«Entendemos que las personas pueden no tener como finalidad discriminar y sin embargo hacerlo por reproducción de estereotipos, por esta razón es necesario el uso de un lenguaje adecuado», explican desde el Observatorio.
El Observatorio de la Discriminación en Radio y TV destacó como un paso importante la sanción de la Ley de Matrimonio Igualitario y la importancia que tendrá la Ley de Identidad de Género, que habilitará la rectificación registral del sexo y cambio de nombre propio a través de un trámite administrativo ante el Registro Nacional de las Personas.