El conflicto por la modificación del sistema previsional se agudizó, luego de que el presidente Evo Morales ratificara que no cambiará la propuesta y la Central Obrera Boliviana, amenazara con radicalizar la protesta si el mandatario no reinstala el diálogo.
El secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB), Juan Carlos Trujillo, envío una carta al mandatario en la que lo conmina a reinstalar el diálogo en las próximas horas bajo amenaza de radicalizar las movilizaciones».
«Por el grado de responsabilidad de la COB le convoca y le conmina al gobierno central a sentarse al diálogo correspondiente el día de hoy, a más tardar, hasta el día de mañana, ocho de la mañana», explicó Trujillo en conferencia de prensa, según reportó la estatal agencia de noticias ABI.
Más temprano, el ministro de Trabajo, Daniel Santalla, señaló que el Gobierno está predispuesto a reanudar el diálogo con la COB «en cualquier momento» para abordar todas las demandas que los trabajadores exigen, aunque ratificó la insostenibilidad del reclamo de los sindicatos.
El mandatario afirmó que la última propuesta del Ejecutivo para modificar el actual Sistema de Pensiones permite a los trabajadores jubilarse hasta con el 80 por ciento de sus aportes.
«Estuve revisando algunos datos para no equivocarme; con la nueva propuesta el 30% de todos los trabajadores fabriles se jubilan con el 80 por ciento de sus aportes y el 70 por ciento de todos los fabriles se jubilan con el 70 por ciento de sus aportes, esa es la última propuesta», enfatizó durante un discurso al inaugurar un centro productivo textil en la zona Pura Pura de la ciudad de La Paz.
Los sindicatos piden una jubilación del 100 por ciento de los últimos 24 recibos de sueldo en actividad del trabajador, pedido rechazado por el gobierno, que planteó una renta máxima de 4.000 bolivianos, equivalentes a 574 dólares y una mínima de 1.200 bolivianos, equivalentes a 172 dólares.
Uno de los sectores en pugna, el de los mineros, reduyo ayer su demanda de aumento de las pensiones de 8.000 a 4.900 bolivianos, propuesta no avalada por la central obrera y también rechazada, hasta ahora, por el Ejecutivo.
La oferta del gobierno, planteada como inmodificable porque ya reduce la sostenibilidad del Fondo Solidario de pensiones de 39 a 30 años, es de 4.000 bolivianos para los mineros y 3.200 para los demás sectores.
«Cuando ya no haya Fondo Solidario ellos (los que trabajadores) se jubilarán con el 30 ó 40 por ciento. Están engañando a la gente que gana poco», subrayó Morales en referenca a las demandas de la COB.
El jefe de Estado explicó que sus ministros están dispuestos a socializar entre los trabajadores de base los detalles técnicos y beneficios de la última propuesta gubernamental sobre las pensiones pero que «algunos dirigentes de la COB no han querido eso».
En tanto, la Conferencia Episcopal Boliviana manifestó hoy su preocupación por la posibilidad de que el conflicto se radicalice a partir del llamado a los seguidores del gobierno de contrarrestar la protesta de la COB y defender en las calles el actual proceso de cambio en el país.
Los grupos leales al mandatario anunciaron para la próxima semana movilizaciones callejeras denominadas «contramarchas» para neutralizar las diarias marchas obreras en ciudades del occidente y oriente de Bolivia.
«Los anuncios de radicalización de medidas de presión y convocatoria de nuevas movilizaciones pueden derivar en la confrontación entre hermanos bolivianos», alertó la Iglesia.
La Conferencia Episcopal reiteró que el diálogo «es el único camino válido y democrático», e instó al gobierno y sindicatos a reanudar la negociación sobre cambios en una polémica ley de pensiones.
Ayer, el ministro de Gobierno, Carlos Romero, había aclarado que las movilizaciones que anunciaron diversos sectores sociales en apoyo a Morales «no buscan generar enfrentamientos ni violencia».
La huelga general con corte de rutas provocó la destrucción de un puente en la carretera que une La Paz y Cochabamba por la explosión de una carga de dinamita activada por trabajadores de la mina Huanuni, el mayor yacimiento de estaño de Bolivia.
Ayer, el gobierno declaró ilegal la huelga de la COB, por lo que a partir de hoy se comenzarán a descontar los días no trabajados.