La acción más acertada para el gobernante es anunciar que ni él ni su hijo van a aspirar a la presidencia, comenta el también ex candidato a la Casa Blanca.
Durante tres décadas Estados Unidos respaldó la política de Mubarak, es hora de ir más allá y revisar nuestra estrategia hacia esa nación, agrega.
Mubarak no puede tomar medidas drásticas otra vez, como intentó al desplegar sus fuerzas de seguridad y bloqueando el acceso a internet, al contrario, tendrá que irse, señaló a su vez el senador Bill Nelson.
El ex gobernador de Massachussets y uno de los posibles precandidatos republicanos a la Casa Blanca en 2012, Mitt Romney, se sumó al coro de quienes piden la renuncia.
Similar postura anunciaron los también eventuales contendientes republicanos Tim Pawlenty, ex gobernador de Minnesota, y Newt Gingrich, ex presidente de la Cámara de Representantes.
Mientras, los representantes demócratas Gary Ackerman y Dennis Kucinich llamaron al gobierno a suspender la ayuda a El Cairo.
Sin embargo, el diario digital politico.com destaca que hasta el momento tanto los líderes demócratas y republicanos en el Congreso se mantienen en silencio y se limitan a apoyar la actuación del presidente Barack Obama.
Pese a las numerosas preguntas sobre el tema, el secretario saliente de prensa de la Casa Blanca, Robert Gibbs, se negó este lunes a hablar sobre la salida de Mubarak.
Sin embargo, el funcionario minimizó los cambios en el Ejecutivo egipcio, al señalar que *»no se trata de nombramientos. Se trata de acciones»*.