Tanto la capital, Madrid, como otras 60 ciudades del país ibérico han vivido una jornada de marchas protagonizadas por 150 organizaciones, entre ellas los sindicatos que representan a las industrias de la construcción, automóviles y la televisión, así como servicios de policía y de salud, como Comisiones Obreras (CC.OO.) y la Unión General de Trabajadores (UGT).
Se estima que más de 300 mil personas han participado en las protestas de este domingo, a saber: 66.000 de Cataluña, 50.000 de Madrid, 30.000 de la Comunidad Valenciana y 20.000 de Asturias.
Según la UGT, uno de los mayores sindicatos de España, las acciones se han convocado para expresar el rechazo a los recortes sociales y laborales del Partido Popular (PP) y pedir la reactivación del empleo y la democracia.
Conforme al portavoz de la UGT, Cándido Méndez, la mayoría de la gente rechaza las políticas de austeridad del Gobierno, las que han empujado a muchas personas a la pobreza, el desahucio, el suicidio.
“Contra el paro, seis millones de razones” y por “una democracia social y participativa”, así se leía en las pancartas de los indignados motivados por el paro, la precariedad laboral, los millones de desempleados sin prestación, el desmantelamiento de los servicios públicos y los recortes en sanidad, educación, dependencia o investigación, entre otras cuestiones.
La tasa de desempleo de España se sitúa en el 26 por ciento de la población activa y la economía está inmersa en su segunda recesión en tres años, con muchos jóvenes graduados y profesionales cualificados que emigran para buscar trabajo en otro país.