La OTAN ha instado a sus miembros a aumentar el despliegue de tropas y equipos militares en las fronteras rusas, informó esta semana la agencia Reuters.
“Se espera que Francia, Dinamarca, Italia y otros aliados se sumen a los grupos de combate liderados por Estados Unidos, Alemania, Gran Bretaña y Canadá para entrar en Polonia, Lituania, Estonia y Latvia con fuerzas que contemplan desde infantería armada hasta aviones no tripulados”, reportó.
En medio de un tono discursivo estadounidense orientado a un potencial conflicto armado con Rusia, “los continuos despliegues parecen estar lejos de ser una medida puramente defensiva”, indicó Jason Ditz de Antiwar.com.
Antes de la reunión del Consejo del Atlántico Norte celebrada el miércoles, el secretario general de la OTAN Jens Stoltenberg dijo a Reuters que el compromiso militar servirá como “demostración clara de nuestra unión transatlántica”.
El Reino Unido fue el primero en revelar detalles del plan al señalar que enviará 800 tropas con tanques y drones, según The Wall Street Journal. “El batallón será defensivo por naturaleza pero tendrá una completa capacidad de combate”, declaró el secretario de Defensa británico Michael Fallon a dicho periódico.
Esta última muestra de poderío militar ocurre luego del anuncio realizado por Estados Unidos en los primeros meses de este año sobre un incremento de tropas en el este de Europa. Así también, cumple la promesa efectuada en julio por la OTAN de aumentar su presencia militar en las fronteras rusas como respuesta a lo que denominó “agresiones” del Kremlin.
Como indica Common Dreams, algunos diplomáticos sugieren que el movimiento sólo forma parte de una estrategia para enviar un mensaje a Rusia y de paso al candidato presidencial republicano Donald Trump, quien se ha quejado de los gastos realizados por EEUU en la defensa de los países europeos.
