Parece que EE.UU. ya no ha podido aguantar las críticas en su contra y se vio obligado a suspender la entrega de bombas de racimo a Arabia Saudí debido a su uso contra el pueblo yemení.
La noticia se ha dado a conocer este sábado por la revista estadounidense Foreign Policy, diciendo que la Casa Blanca ha tomado esta decisión bajo presiones del Congreso y las organizaciones pro derechos humanos.
“La coalición liderada por los saudíes usaba bombas de racimo en el conflicto armado en Yemen”, ha confirmado un oficial estadounidense al consultar el tema con la agencia francesa de noticias AFP.
Este responsable del Gobierno norteamericano ha aducido que Washington sabía de este problema, para después manifestar que la Casa Blanca toma “muy en serio” las preocupaciones al respecto.
Estas municiones, según la fuente, fueron utilizadas en las zonas donde los civiles estaban presentes, pues ha agregado que Estados Unidos busca información adicional en torno a estos informes y también Arabia Saudí está investigando el asunto.
Estados Unidos respalda a Riad en su agresión contra Yemen desde marzo de 2015 y les brinda a los saudíes apoyos logísticos y equipamientos militares para que Arabia Saudí salvaguarde sus intereses en Yemen.
Pese a los llamados de la comunidad internacional, hasta el momento Arabia Saudí, Estados Unidos y Brasil se han negado a ratificar la Convención Internacional sobre Armas de Racimo, adoptada en mayo de 2008 por 116 países del mundo.