Como parte de la preparación de un aporte para el próximo Foro de Comunicación Popular y Comunitaria, a realizarse en Quito, los últimos días de junio, estamos entrevistando algunas experiencias. Una de ellas, Radio Victoria, en Cabañas, El Salvador. Conversamos con Oscar Ramírez Beltrán, uno de los miembros del equipo coordinador de la radio. Esto fue lo que nos contó.
Sobre información
Radio Victoria tiene sentido por sus comunidades. Desde ellas se construye nuestra agenda informativa y es con ellas, a través de la red de corresponsales populares y de los grupos de radioescuchas, que nosotros damos seguimiento a los diferentes temas. ¿Cómo sabemos si lo que se informa ayuda o no las comunidades? Porque los grupos de radioescuchas nos ayudan.
Ellos nos dicen qué les gusta o no, qué de lo que radio hace es pertinente o no y si la radio no lo hace, nos lo dicen… “no está tocando temas de mujeres, de violencia intrafamiliar”, por ejemplo. Nos interpelan para que toquemos los temas que interesan.
La radio aporta mucho en ese sentido y también hemos tenido experiencias de que las comunidades nos inviten a ser testigos de honor de cómo sus problemáticas, sobre las que hemos informado, se han resuelto. Es la comunicación de las comunidades a través de la radio.
La comunicación es un derecho humano, tan fundamental como la educación o la alimentación. En nuestra zona de cobertura las comunidades son muy conservadoras, pero ha habido situaciones y momentos en la historia de la radio en las que hemos visto cómo la gente usa el medio para demandar, expresarse y juntarse cuando ha sido necesario hacerlo.
El tema de la minería, por ejemplo, movilizó tanta gente que el gobierno de turno se dio cuenta de lo difícil que estaba entrarle al tema. Había mucha resistencia. Así medimos la relación entre nuestra agenda informativa y su utilidad en las comunidades.
Son las familias quienes hacen el trabajo de corresponsales y de radioescuchas. Lo están discutiendo desde la comunidad. La radio no está arriba, está inmersa en la comunidad.
Sobre programación
En las zonas rurales hay mucho problema con el tema de violencia hacia la mujer, en diferentes niveles y de diferentes maneras. No solamente porque las golpean sino por una serie de situaciones que las violentan de otros modos. A nosotros se nos cuestionó fuertemente. ¿Cómo es posible que la radio no entre en este tema desde la mirada de la mujer? Nos decían “usted, por ejemplo, ¿alguna vez ha sentido cómo una mujer se siente en su período menstrual? Y pues no, nosotros no sabemos, y esos sentimientos se querían a través de la radio. Así que ese es un ejemplo de programa “De mujeres para mujeres”, en el que se abordan no solamente temas típicamente considerados de mujeres, sino temas de economía, de política, pero desde la mirada de las mujeres.
Creamos, con el tema de la minería, un espacio para socializar los impactos de este tipo de proyectos, dar información a la comunidad para que después decida lo que considere mejor. Pedir opinión a la gente de temas que no conoce, sobre los que no ha sido informada, no es responsable.
Tocamos temas de derechos sexuales y reproductivos, trabajados por equipos y colectivos que saben del tema. Gente de organizaciones y comunidades que tienen esos espacios. En cuanto a los jóvenes, creamos espacios para que sean ellos mismos quienes elaboren sus miradas y debates sobre el país y sobre los temas que más le interesan.
El noticiero es un espacio que articula, porque su mayor apuesta está en lo local. Ubicar a nuestra gente en lo que está pasando en los diferentes ámbitos locales y la radio está bien posicionada por ese lado: la gente dice que quiere escuchar lo que se mueve en nuestro departamento y lo encuentra en la radio.
Para nosotros es importante cómo construimos y ayudamos a nuestra gente y nos ayudamos unos a otros. También los niños y niñas tienen lugar en nuestra programación. Y con ellos uno toca a las familias. Ellos no escuchan la radio solos, la escuchan con adultos.
Sobre su mensaje
Creo que nuestro mensaje está sobre todo en materia de crear sujetos de derechos, personas que sientan que son seres humanos y que se empoderan de sus derechos. Es la vida completa del ser humano. Hacia allá va nuestro mensaje y hasta ahora creemos que no estamos tan perdidos porque está moviendo sectores, están reaccionando, se están involucrando. Incluso, cuando la radio vivió el momento de amenazas pensamos que nadie iba a querer entrar a la radio pero no fue así, fue el momento en el que los jóvenes mostraron su interés en participar en ella.
Creemos que motivar a la ciudadanía a que se inserte en sus propios procesos y aporte desde su experiencia ayuda a construir tejido social. En los últimos años hemos hecho encuentro en la radio y las comunidades llegan y se conocen entre ellos, de comunidad a comunidad, que solo se conocía por sus voces. Le da rostro a las voces y nos ayuda a que la gente comparta experiencias de sus comunidades.
Sobre participación
Yo creo que ha ido creciendo. Primero porque la etapa de surgimiento de las radios comunitarias llega en un momento en que la gente no sabe mucho cómo utilizar un instrumento como este. Pero mientras más lo saben, se involucran más, participan más. Ven a la radio como un espacio para ayudar a construir debate sobre los temas que nos interesan como comunidades. Saben que la radio no son solo aparatos y un equipo que está ahí, sino que la radio son las comunidades y lo asumen de esta manera, y la radio los acompaña en sus procesos de avances, de resolución de problemas y la ven como un aliado importante dentro de su lucha social.
Sobre Incidencia
Nuestra experiencia en El Salvador y en Radio Victoria ha sido fundamental. En momentos difíciles donde no había otros medios para comunicarse, los comunitarios fueron los medios. Se dice que la radio ya no va a tener vigencia por el avance de las TICs, yo creo que no, que sigue teniendo mucho peso y sigue articulando a las comunidades, moviéndolas y el que ya lo vean como una herramienta de poder me parece que muestra lo que realmente está pasando con nuestras comunidades.
El intercambio de experiencias ayuda a articular el movimiento social. La relación entre la radio y las comunidades es fundamental. Les ayuda a armar vínculos entre ellas.
A mi me parece que hay que crear más medios de comunicación comunitaria. Entre más diversificación de medios y posibilidades para comunicarnos, se fortalece mejor la cercanía y la convivencia. La radio comunitaria ha sido un instrumento de sobrevivencia en muchas situaciones de nuestras comunidades. En tiempos de guerra y persecución la radio ha sido vital, literalmente, para la vida de las comunidades.
No podemos confiarnos en la tecnología y tenemos que evitar que la tecnología nos limite el vínculo con las comunidades. Hay que encontrarse, decirse las cosas, acompañar a las comunidades. Cada vez apostamos más por estar con las comunidades y crear capacidades para que sean ellas las que asuman este proyecto. No es un proyecto nuestro, esto deben asumirlo luego jóvenes y personas de las comunidades. El tejido social se fortalece muchísimo, el tema de derechos humanos se ha fortalecido muchísimo y eso es lo más importante: las relaciones humanas que se generan a través de la radio.