El Teatro de Verano o Tablados comerciales y municipales en Montevideo, se encontrará con enormes fotos de mujeres y hombres integrantes de conjuntos de carnaval, en primer plano, ocupando fachadas e interiores. Por la urgente situación de violencia hacia las mujeres en Uruguay, diversas organizaciones sociales, integradas en su mayoría por jóvenes, proponen una intervención urbana en uno de los espectáculos más populares del país; el Carnaval.
Uruguay posee una de las tasas más altas, dentro de América Latina y el Caribe, de asesinatos de mujeres a causa de la violencia ejercida contra ellas. En el año 2015, fueron asesinadas 39 mujeres.
Esta violencia se manifiesta en todas las etapas de la vida de las mujeres y adquiere diferentes modalidades, siendo el asesinato una de sus expresiones más terribles.
Creemos que la cultura y sus diferentes expresiones tienen mucho que aportar a la construcción de una sociedad justa, igualitaria y libre de violencia contra las mujeres. Uruguay ha avanzado en el reconocimiento formal de los derechos de las mujeres, pero para avanzar en el reconocimiento real se hace necesario trabajar estrechamente con la cultura como motor fundamental de cambio.
El Carnaval en Uruguay es una fiesta popular que agrupa a personas de diferentes barrios de Montevideo y del interior del país. Elegimos el carnaval porque es la expresión cultural de nuestras tradiciones, es donde se juntan el arte, el canto y la denuncia, es aquello que nos reúne en todos los barrios, es parte de la identidad más fuerte que tenemos en Uruguay. Es considerado un espacio en donde se hacen eco y se amplifican las diversas problemáticas sociales, un lugar que construye una “resistencia cultural”.
A pesar de esto, el lenguaje y productos que muchas veces genera el carnaval han sido terriblemente estereotipados en relación al género, manteniendo y naturalizando el lugar que mujeres y varones deben tener en la sociedad reproduciendo desigualdades. De un tiempo a esta parte hay señales positivas; se empiezan a observar nuevas narrativas que a surgir, y emergen mensajes que intentan romper con algunos de estos estereotipos que ubican a varones y mujeres en determinados roles. Si bien el eje de la campaña no se centrará en la violencia contra las mujeres al interior del Carnaval, el ubicarla en este contexto puede llevar al planteo del tema y la reflexión también en este espacio.
Desde la organización de Canto y no callo queremos darle poder a esas voces calladas, a esos silencios que se naturalizan, darle voz fuerte y clara, entender entre todos y todas que “cantar”, expresar lo que sucede, lo que vemos: puede cambiar la vida de una persona e incluso salvarla. Seamos partícipes, actuemos ante esta realidad en todos nuestros espacios: en las casas, en las calles, en el trabajo, en las familias, en el grupo de amistades y en todos los espacios públicos; para contribuir a construir otras formas de vincularnos y relacionarnos.
Intervenimos el carnaval para que el deseo de una sociedad libre de violencia contra las mujeres -en todas su expresiones- sea una realidad: ¡Canto y no callo!
Servicio telefónico de orientación y apoyo a mujeres en situación de violencia doméstica:
0800 4141 o desde el celular al *4141
Contactos y más información campaña Canto y no callo:
Facebook/Twitter: Canto y no callo
Organiza: Proderechos, Colectivo Can Variá, Mujeres en el Horno, Mizangas Mujeres Afrodescendientes, Casa Tomada, Ovejas Negras
Apoya: INMUJERES (MIDES), Dirección de Promoción Socio Cultural (MIDES), Ministerio de Educación y Cultura, Intendencia de Montevideo, IMPO Centro de Publicaciones Oficiales, DAECPU Asociados Espectáculos Carnavalescos