Por Gustavo Goren
Comisión Parques de Estudio y Reflexión Chaco
El sábado 5 y domingo 6 de diciembre realizamos el 10º Aniversario del Parque. Hace 10 años, Silo (fundador y orientador de esta corriente espiritual, fallecido en el 2010) “consagraba” el Parque, para irradiar su mensaje de paz y no violencia. A partir de allí la sala, construida hace 40 años como un experimento, fue utilizada como prototipo para los nuevos Parques de Estudio y Reflexión en todo el mundo, que hoy ya son alrededor de medio centenar.
En el Encuentro convergieron amigos mensajeros y maestros de distintas provincias y países, miembros del Colectivo Nacional, con su secretaria de derechos humanos y de género; del Programa del Pensamiento Nacional, del canal 9 y del coro Chelaalapi. También hubo difusión por otros medios radiales y gráficos. Fueron muy enriquecedores los intercambios, basados en la experiencia personal de los participantes. Realizamos una visita a cada símbolo que compone el Parque (Portal, Estela, Monolito, Fuente y Sala) compartiendo su sentido, su significado. Además realizamos varias Ceremonias de Bienestar pidiendo por la gente querida y por todo el pueblo chaqueño. Hubo adhesiones de múltiples organizaciones sociales, educativas y culturales, como también de personas sensibles a la propuesta, a nivel nacional e internacional.
El evento comenzó luego de una ceremonia, recordando la inauguración del Parque en el año 2005 a través de unas palabras alusivas y del video con las palabras de Silo expresadas en aquel momento. Y como cierre se proyectó: “Silo, la Película”, con su biografía.
También el Planetario Chaco dio una función gratuita a los presentes incluyendo a los chicos del barrio La Toma que vinieron de visita para el evento, compartiendo los mensajes que los griegos veían en el cielo, y que aún hoy podemos observar.
Todos quedamos muy contentos con la experiencia de compartir tantas vivencias, con la sensación de empezar a trabajar codo a codo con amigos provenientes de distintas fuentes, pero guiados por una dirección que apunta a objetivos similares que permite que podamos aprender mutuamente muchas cosas, y así potenciar la acción y la influencia en el medio. Los presentes nos sentimos unidos por una atmósfera de hermandad, solidaridad y buenos deseos que nos alienta y empuja a creer y actuar para que un mundo sin violencia sea posible.