La sociedad enfrenta el gran desafío de desestigmatizar el duelo por la pérdida de una mascota, ayudando a que más personas se sientan comprendidas y validadas en su dolor.
Por María Silvina González Astobiza
La muerte de una mascota puede ser devastadora. Para muchas personas, los animales no son «solo mascotas», sino compañeros de vida, miembros de la familia o incluso un apoyo emocional en momentos difíciles. Sin embargo, el duelo por la pérdida de un animal de compañía no siempre recibe el respeto o la comprensión que merece.
El vínculo con las mascotas es tan profundo que a menudo se las trata como si fueran humanos. Esto es más evidente cuando los animales llenan vacíos emocionales, ocupando roles que sus cuidadores no han tenido o han perdido. En estos casos, la pérdida puede sentirse tan significativa como la de un ser humano cercano.
La minimización del duelo: un obstáculo emocional
Es común escuchar comentarios como «solo era un perro» o «ya deberías haberlo superado». Estas frases generan incomprensión, vergüenza o incluso culpa en quienes atraviesan el duelo, llevándolos a ocultar o minimizar su dolor para cumplir con las expectativas sociales. Sin embargo, la realidad es que la pérdida de una mascota puede ser tan dolorosa y significativa como la de un ser humano.
Cada relación con una mascota es única, por lo que no hay una manera «correcta» o «incorrecta» de vivir el duelo. Todas las emociones, desde la tristeza hasta el enojo o la confusión, son válidas. Lo importante es dar espacio a ese dolor, sin prisa ni juicios sobre cuánto debe durar.
El proceso de despedida también influye en la forma en que se vive el duelo. Sea por una enfermedad terminal, la vejez o un accidente, contar con un acompañamiento respetuoso y empático puede marcar una gran diferencia en cómo se enfrenta este momento tan doloroso.
Buscar apoyo y acompañamiento emocional
El acompañamiento en el duelo por la pérdida de una mascota es invaluable. Los grupos de apoyo, ya sean de amigos, familiares o comunidades especializadas en duelo por mascotas, ofrecen un entorno donde las personas pueden expresar su dolor sin ser juzgadas. Compartir experiencias en estos espacios es clave para la sanación. Pedir ayuda no es una señal de debilidad, sino de fortaleza.
Si estás atravesando la pérdida de una mascota, no dudes en buscar apoyo especializado. No estás solo en este proceso, y validar tu dolor es el primer paso para sanar y comenzar una nueva etapa en tu vida.
María Silvina González Astobiza es Diplomada en Tanatología Asistencial y Educativa. Doula de Fin de Vida. Coach de Duelo por Pérdida de Mascotas. Fundadora de Sentir & Acompañar y, de Resilio & Vita. Facilitadora de Death Café Málaga. Co-coordinadora del “Ciclo de Conversaciones”.