Este martes 3 de diciembre se llevó a cabo el lanzamiento oficial del libro «Pedagogía de la Expresión», de Paulina Hunt y Ricardo Rodríguez en el Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM) de Santiago. El evento comenzó con una pieza musical minimalista de Felipe Castro (Buen Clima), compositor multiintrumentista e hijo de Paulina, seguida de un mensaje por video de Pablo Rojas Durán, autor del prólogo del libro, planteando una pregunta que se me quedó flotando en la cabeza: «¿No es acaso la pedagogía la dimensión poética de la enseñanza?»
Tras ello, intervino Daniela Cobos, docente en pedagogía del arte de la Universidad de Chile, quien señaló: «Creo que como docente de artes visuales, y más todavía en el caso de los actores y actrices, este libro es un tremendo aporte a la toma de conciencia de la importancia de la expresión corporal en la enseñanza a lo largo de toda la vida. No se puede tener a un niño quieto cuando todo su cuerpo quiere expresarse y experimentar el mundo. El cuerpo es también parte de la cognición humana«.
A continuación, Dario Ergas leyó sus interesantes y lúdicas impresiones de la lectura del libro:
«El conocimiento es una construcción en el hacer, particularmente en el hacer junto a otros, por tanto, es un conocimiento dinámico y se recrea cada vez. No es información acumulada. Y el hacer no es sólo físico sino también emocional e intelectual.
Se enfatiza en la pregunta, para despertar el interés y la curiosidad. Preguntar, es lo que nos da profundidad, y las respuestas que obtenemos, deben abrirnos a nuevas preguntas. También, se dan pautas, para el desarrollo de una mirada interna, sobre los procesos corporales, emotivos y mentales en general.
Por ejemplo, cómo logramos reconocer “la creencia” que configura nuestra imagen del mundo. ¿Acaso lo percibido es una creencia y no una realidad? y al develar esa creencia ¿la querremos cambiar por otra más evolutiva? y ¿cómo se hace eso? Y todo esto, se realiza riéndonos mucho de nosotros mismos.»
Le tocó el turno a la autora (el coautor no pudo asistir), que agradeció profundamente a quienes asistimos, y presentó al equipo que hizo posible la edición y maquetación del libro: en públicación, Javiera Martínez (productora), Adriana Castro (multifunciones, productora, pedagoga de la expresión), Juan Guillermo Ossa (pareja y director administrativo) y en diagramación, Riccardo Marinai (diseño) y Carlos Gustavo Cortés (ilustrador).
Tras ello, era que no, invitó a los presentes a levasalieran de su posición de sentados y saludaran a alguien al que no conocían. Yo elegí a la hermana de Paula, o ella me eligió a mí, y nos quedamos mirando, sonriendo, a la espera del resto de las instrucciones. Intercambiamos frases y miradas, y eso era todo. No sé si lo hizo para hacernos mover el trasero o para no incomodar más todavía a los que ya estábamos un poquito incómodos.
«Yo todo lo que apunto a lograr con este libro es hacer surgir la sensación de humanidad compartida. Así que… ¡era eso, nomás!»
Después cinco jóvenes voluntarios hicieron una hermosa dinámica interactiva con el público en torno a la pregunta del «otro», tras lo cual Paulina señaló:
«Parte fundamental de este libro tiene que ver con el cuestionamiento de lo que tenemos como concepción de ´lo humano´, con preguntas y provocaciones para que cada uno y cada una revise cuál es la creencia que tiene al respecto, ya que eso obviamente va a determinar nuestra acción. Cuando Dario decía que hay una certeza, una mirada de distintos autores acerca de que existe algo muy grande dentro de cada uno y cada una, eso es así, y tiene que ver con una visión. Así que los invito a ver este tema con profundidad, y para ello he invitado a cerrar este evento con una artista y amiga que siempre nos lleva a estos niveles».
El evento finalizó con un conmovedor rito dirigido por la artista porteña Maricel Muñoz, que hizo de nuestras voces un coro multitonal.
Más info sobre el libro en www.pedagogiadelaexpresion.com
