El próximo lunes (9) se dará a conocer en el Teatro Bolshoi de Moscú, a la persona o institución galardonada con el Premio Internacional de la Paz Tolstói.

La fecha coincide con el aniversario natalicio del gran escritor y pensador ruso Lev Nicolaevich Tolstói (1828-1910), un símbolo destacado de la cultura rusa, reconocido como un clásico de la literatura universal.

Sin duda que sus experiencias con el horror en el transcurso de la guerra de Crimea, contribuyeron a forjar en Tolstói la íntima convicción de luchar contra el mal de la guerra y la violencia y el deseo de ser un iluminado amante de la paz.

Su nombre y la magnitud de su legado y su personalidad se corresponden plenamente con la idea y los objetivos del Premio Internacional de la Paz, que se concederá anualmente a personas u organizaciones que hayan contribuido significativamente al fortalecimiento de la paz y la amistad entre los pueblos.

Instituido por la fundación homónima, el premio tiene por objeto reconocer logros destacados en actividades encaminadas a contrarrestar la amenaza de desencadenar una tercera guerra mundial y a prevenir una catástrofe nuclear.

Según lo señalado en la respectiva página informativa, la condecoración pretende reconocer contribuciones significativas a garantizar una seguridad universal e igualitaria basada en el imperio del derecho internacional, poner fin a la carrera armamentística, construir un mundo multipolar y no violento, reforzar el entendimiento mutuo y la cooperación entre los pueblos.

La distinción, que incluye un diploma que acredita al laureado junto a una medalla de oro con la efigie de L. N. Tolstói, apunta además a destacar importantes logros en la desmilitarización, democratización y humanización de las relaciones internacionales sobre la base de normas morales y jurídicas generalmente aceptadas, así como en la resolución de los problemas globales de nuestro tiempo.

La activa lucha por la paz y los esfuerzos desarrollados en defensa de los derechos humanos y las libertades, son también otros criterios que determinarán la elección de la organización o personalidad merecedora del Premio.

El Jurado está constituido por personalidades rusas y de otros países de amplio reconocimiento internacional. Su presidente, el director de orquesta Valery Gérguiev, actual director del Teatro Mariinsky de San Petersburgo y del Teatro Bolshói de Moscú, expresó; “El mundo actual no es más solamente un asunto reservado a políticos u observadores. Todos los adultos están hoy pensando en el futuro de sus hijos y nietos. ¡Todos!”

Por su parte, el ex ministro de cultura de Rusia Mijaíl Shvydkoy, reflexiona sobre el premio en una nota publicada por el diario Rossiyskaya Gazeta.

“La transición de un mundo unipolar a otro multipolar, a la que aspiran Rusia y los países del Sur global, no debería conducir a una nueva guerra mundial. A pesar de la existencia de conflictos militares regionales, que también requieren su finalización, deben hacerse todos los esfuerzos posibles para evitar una catástrofe mundial, de cuya posibilidad se ha llegado a hablar con espantosa facilidad.

Por eso es tan importante hoy el Premio Internacional de la Paz León Tolstoi, que con toda su obra y toda su vida afirmó los más altos valores del humanismo. Esos valores que determinaron el gran papel de Rusia en la historia de la civilización y la cultura humanas.”, concluyó.

Valores que, en el actual torbellino geopolítico, serán decisivos para alcanzar una paz duradera y efectiva para todos los pueblos de la región y el mundo.