Con la economía a la deriva, con el salario mínimo más bajo en 30 años, con la industria en su pozo histórico, con el desempleo en alza, la inflación en alza, los bonos argentinos a la baja y una recesión que cada vez más profunda, el presidente libertario Javier Milei quedó invisibilizado y relegado, mientras crece el enfrentamiento entre la vicepresidenta Victoria Villarruel y la hermana del mandatario, Karina, a la que él llama “El Jefe”.
Preocupa también al gobierno el giro en el posicionamiento político del neoliberalismo, que enfrió su relación con el gobierno, giro que se trasladó también al Congreso, donde el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, quedó en el centro de la mira de la macrista Propuesta Republicana (PRO).
Después de haber coqueteado con una integración parlamentaria e incluso con la participación en el gabinetge, el PRO parece haber vuelto a la «oposición dialoguista», donde también se encuentran la Unión Cívica Radical (UCR) y Hacemos Coalición Federal, entre otras fuerzas políticas menores
Menem es sindicado de dilatar el tratamiento de proyectos de los diputados macristas y por haber manejado mal el escándalo por la visita de diputados libertarios a genocidas presos, y le exigieron que haga un pronunciamiento público al respecto.
¿Dolarizar?
Mientras, el ministro de Economía Luis Caputo admitió que el gobierno sacó del país parte de las reservas en oro del Banco Central (BCRA) para depositarlas en el exterior (Reino Unido, que ya se apropió de ls reservas de oro venezolanas) y someterlas a las especulaciones del mercado internacional, mientras celebraba que «en breve la gente va a tener que vender dólares para pagar impuestos y el peso va a pasar a ser la moneda fuerte».
«¿No era que los impuestos eran un robo del Estado, el peso un excremento y el dólar, la moneda que le iban a dar a los argentinos…?», le enrostró la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner. Y definió al rumbo del gobierno de Javier Milei: «Más perdidos que turco en la neblina».
El gobierno libertario trata de atar con alambre los desequilibrios financieros y rifar reservas a la espera de un triunfo de Donald Trump que traiga una solución milagrosa de dólares frescos hacia el año próximo, pero si el gobierno espera que Trump facilite esos dólares a través del FMI el panorama también es incierto: allí votan Francia, China, Alemania y otras potencias, con las cuales el gobierno de Milei se empeña en enemistarse.
La recuperación que prometió el gobierno no llega mientras las tendencias recesivas avanzan con peligro de que se consolide un panorama de depresión económica. ¿La situación social resiste más penurias? Una a favor del gobierno, la inflación sigue aplacada por el efecto del hundimiento de la actividad económica.
Algunos analistas señalan que los anuncios del oficialismo apuntan a acercarse a la dolarización endógena de la economía, algo así como una dolarización por mecanismos de mercado. Pero en Argentina es muy difícil, pensar una dolarización pacífica, indolora, implementada simplemente a través de mecanismos de mercado, debido a la enorme reestructuración que implica un cambio de régimen monetario de esa envergadura.
«A los que defienden el modelo de Javier Milei y Luis Caputo no les interesa el trabajo ni la producción, mucho menos el consumo o el mercado interno. Sólo le importan los saldos exportables. Es un modelo extractivista agrícola clásico, donde sólo se prioriza lo que se exporta «, señala el economista Horacio Rovelli.
«Esto es un engendro africano, es un enclave colonial”, añadió, tras señalar que el gobierno volverá a devaluar por presiones del FMI: «La deuda de los primeros cinco meses del año aumentó en 65 mil millones de dólares, llegando a más de 435 mil millones. Todo el ajuste que hicieron no es la mitad de lo que han endeudado. A este gobierno no le interesa la gente, sólo es servil a los intereses financieros. Cuando el pueblo se dé cuenta y salga a la calle, va a ser muy tarde», indicó.
Todo ese mecanismo de deuda y “bicicleta financiera” lleva a una mera factoría exportadora con nuevos ciclos de endeudamiento que pagará el pueblo. Los recursos naturales pertenecen al pueblo argentino y a las generaciones futuras, no a un gobierno y a los corruptos legisladores que propician su enajenación y entrega.
El gobierno cede los recursos naturales del país y luego vuelve a endeudarse para repetir el procedimiento, cumpliendo lo que dijo Mark Stanley, el embajador de Estados Unidos: “La Argentina tiene lo que el mundo necesita”. Lo que no dijo es a qué precio, dado que en este nuevo coloniaje una vez más al país le cambian oro por espejitos.
Milei tiene la costumbre de responsabilizar a los demás de su impericia y sus fallas. Ahora acusó al director para el Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional (FMI), Rodrigo Valdés, de “no querer” que le vaya bien a Argentina y de pertenecer al Foro de Sao Paulo y al Grupo de Puebla, que para él son “zurdos”, es decir de izquierda.
Reclamó que su gobierno cumplió con todo pero (los del FMI) “están todo el día poniendo peros” y trató de terminar con las dudas sobre el pago de deudas y las reservas, mientras se disparaba el peso de los títulos del Tesoro en el activo de los bancos. En solo seis meses, Milei logró el peor registro de desigualdad medida por GINI en 16 años; 0,4627.
Francia, racismo y genocidio
En la semana en que las redes sociales se inundaron de mensajes que alimentaron la polémica sobre si la canción cantada por los jugadores de la selección de fútbol tras su coronación en la Copa América es o no racista y antifrancesa. En paralelo, desde Francia se acumularon los repudios, que incluyeron una demanda de disculpas por parte de la Federación gala.
Y sin que ningún funcionario francés haya hecho mención al asunto, la vicepresidenta argentina Victoria Villarruel se ocupó en forma precoz de convertir el tema en una cuestión de Estado.
«Argentina es un país soberano y libre. Nunca tuvimos colonias ni ciudadanos de segunda. Nunca le impusimos a nadie nuestra forma de vida. Pero tampoco vamos a tolerar que lo hagan con nosotros. Argentina se hizo con el sudor y el coraje de los indios, los europeos, los criollos y los negros. Ningún país colonialista nos va a amedrentar por una canción de cancha ni por decir las verdades que no se quieren admitir. Basta de simular indignación, hipócritas, escribió en redes.
La admiradora de genocidas criollos como Julio Roca y Jorge Rafael Videla prefiere olvidar que la formación del Estado argentino se basó en el genocidio de los pueblos originarios que habitaban los actuales territorios del oeste bonaerense, La Pampa y Río Negro, con la matanza miles de integrantes de los pueblos mapuche, pampa, ranquel y tehuelche, para adueñarse sus tierras ancestrales.
Jamoncito
Según Villarruel, Milei es un “jamoncito” entre ella y la hermana Karina. El mensaje demagógico de la vicepresidenta contra Francia fue aprovechado para una sobreactuación de la hermana presidencial, que se presentó en la embajada de Francia para excusarse.
Mientras, Karina –a quien nadie votó- gana lugar, terreno, áreas, interviene ministerios, toma decisiones, bloquea designaciones, acepta nombres, arma el partido a nivel nacional y suele ser la última palabra de la Casa Rosada. Está en todas las fotos: cuando Milei reunió a los gobernadores en Tucumán, Karina exigió que todos fueran vestidos de oscuro: ella apareció con un vestido rojo fuego y su cabellera rubia, quizá para pasar inadvertida.
Como parte de su batalla con la vicepresidenta Victoria Villarruel, Karina tomó sola la determinación de ir a pedirle disculpas el embajador francés por un tuit de la vicepresidenta, a pocos días de la visita que realizará Milei a ese país invitado por Francia.
Que haya ido sola a la embajada de Francia da cuenta del desconocimiento a la canciller Diana Mondino, que tiene su área intervenida y muy acotada sus funciones desde que no le advirtió a Milei que en un acto iba a estar presente el diplomático de Palestina. Mientras, Guillermo Francos, jefe de gabinete, sigue perdiendo terreno y apenas le queda la relación con gobernadores.
Quien crece en el entorno de gobierno es Santiago Caputo, el «humilde consultor», quien logró crear una nueva Secretaría de Inteligencia, un aparato gigante y poderoso, donde convivirán todas las tribus históricas de los servicios bajo sus órdenes (no confundirlo con el ministro de Economía, Luis Caputo).
Hay un rasgo grotesco en todo lo que hace este gobierno, como pelearse con sus socios comerciales, con China y Brasil o, como en este caso, con el presidente francés que acaba de invitarlo a visitar su país.
El incidente demagógico-futbolero fue agravado por la visita silenciosa de un grupo de seis diputados oficialistas al culpable del secuestro de las monjas francesas Alice Domon y Leonie Duquet. Los diputados, cercanos a la vicepresidenta, se reunieron con Alfredo Astiz –condenado a cadena perpetua por crímenes de lesa humanidad– y otros genocidas en la cárcel de Ezeiza en busca de una fórmula que les permita liberarlos.
En Francia tuvo mucha resonancia la desaparición de las monjas francesas, secuestradas por un grupo de la Escuela de Mecánica de la Armada encabezado por Astiz. Las monjas fueron torturadas y luego arrojadas al océano en los vuelos de la muerte. La visita de los diputados libertarios, llevados por un chofer y un vehículo oficial de la Cámara de Diputados, constituyó también un agravio para el gobierno francés.
El gobierno de los Hermanos Milei está incurriendo en una inflación de tonterías, que se superponen y se persiguen en una carrera fantasmagórica, con afirmaciones inapelables que se desmienten pocas horas después.
Todo ésto “en medio de descalificaciones escatológicas a quienes no hubieran adherido con veneración a cada fase de esa descontrolada tormenta solar, no importa que sea periodista, político, economista, ministro, banquero, Vicepresidenta, asesor presidencial, o delegado del directorio del FMI para Subamérica o, como le dicen ellos, el Hemisferio Occidental”, señala Horacio Verbitzky.
