Las autoridades francesas deben dar una respuesta urgente, global y duradera a la interrogante planteada por los 3.000 migrantes que intentan cruzar al territorio de Gran Bretaña por el paso de Calais, exigió el Alto Comisionado para los Refugiados (ACNUR) de las Naciones Unidas.
La crisis está bajo control pero debe ser tratada con “urgencia nacional”, explicó Vincent Cochetel, responsable del ACNUR para Europa, toda vez que “no se puede modificar la geografía”, dijo. El dirigente humanitario indicó asimismo que hasta este momento nadie había adoptado las medidas apropiadas para poner fin a la situación.
Utilizar los cuarteles vacíos para acoger a los migrantes y acelerar el análisis de los pedidos de derecho de asilo (el simple registro del pedido se efectúa en la actualidad al cabo de siete semanas después de su presentación) figuran entre las peticiones emitidas por la ONU, que también se dirigió a las autoridades británicas a las que criticó de falta de colaboración con Francia. La situación en Calais es en gran parte el resultado de una aplicación no coordinada y parcial del sistema común de asilo de los países de la Unión Europea, concluyó a este respecto el ACNUR.