Abdourahman Mohamed Guelleh, conocido como TX, es un líder no violento de la oposición política en la República de Yibuti. Principal opositor al régimen de Yibuti, es el líder fundador de RADDE, un movimiento no violento a favor de la democracia. TX fue alcalde de la ciudad de Yibuti y secretario general de la mayor coalición de oposición política de la historia de Yibuti.
Este opositor al régimen está muy comprometido con la no violencia y la paz. A pesar de su compromiso con la oposición no violenta, recibió una amenaza de muerte del Presidente de la República de Yibuti en 2022. Fue encarcelado. El régimen le confiscó el pasaporte durante tres años, de 2016 a 2019. Actualmente, se le deniega la renovación de su documento de viaje. Esto le impedirá visitar a su esposa e hijos exiliados en Bélgica. Pressenza se reunió con TX y le preguntó sobre la situación de los derechos humanos en Yibuti.
1-Entre 1896 y 1977 Yibuti fue colonia francesa. ¿Cómo son actualmente las relaciones con la antigua potencia colonial?
Abdourahman TX: Las relaciones entre el pueblo de Yibuti y Francia son excelentes. Son relaciones privilegiadas y estratégicas a todos los niveles. Francia es el único país con el que mantenemos acuerdos de defensa desde hace casi medio siglo. Estas relaciones se basan en una sólida base de confianza. Estas relaciones sólidas, estratégicas y únicas entre nuestros dos pueblos deben mantenerse y reforzarse aún más.
2- No menos de cinco países -Francia, Estados Unidos, Italia, Japón y China- han establecido sendas bases militares en territorio yibutiano. ¿A qué se debe?
TX: Estas grandes potencias mundiales no están en nuestro país por casualidad. Su presencia y sus bases militares demuestran la posición geoestratégica y geopolítica de Yibuti en la región del Cuerno de África y del Mar Rojo, como centinela en la confluencia de las rutas marítimas y comerciales de varios continentes, a saber, África, Europa y Asia. El Mar Rojo es uno de los principales pasos marítimos para el comercio mundial. Las tensiones actuales en el Mar Rojo demuestran esta importancia geoestratégica para las grandes potencias y justifican su presencia allí.
La presencia de bases militares estadounidenses, europeas y chinas en la misma pequeña zona demuestra la importancia geoestratégica y geopolítica de nuestro país. Desgraciadamente, los recursos financieros generados por todas estas grandes bases pertenecientes a las potencias militares mundiales no benefician a la población de Yibuti porque el régimen en el poder es autoritario, corrupto y famoso por malversar fondos públicos. No hay transparencia ni rendición de cuentas.
3-Yibuti es un Estado muy cortejado. ¿Influye la situación geopolítica de Yibuti en el estado de los derechos humanos en el país?
TX: Las violaciones de los derechos humanos en la República de Yibuti son frecuentes y constantes, a pesar de la fuerte presencia de potencias democráticas como Francia, Estados Unidos y la Unión Europea. Afortunadamente, los gobiernos de estos países están reaccionando ante los abusos, utilizando su influencia y abogando por el respeto de los derechos humanos en Yibuti. Esto es alentador, pero sigue siendo insuficiente.
Las potencias democráticas presentes en nuestro país deben mostrar visión a medio y largo plazo, pensar en objetivos estratégicos en un mundo en el que la democracia está en retroceso, y apoyar con valentía al pueblo de Yibuti, que no cesa de demostrar su deseo de engrosar las filas de los países libres y democráticos. Es su interés y su responsabilidad hacerlo.
Permítanme darles un ejemplo reciente de violación flagrante de los derechos de los niños y las mujeres. Mi mujer y mis hijos, exiliados en Bélgica, no podrán volver a verme. Mientras respondo a sus preguntas, a mi regreso de Bélgica, por instrucciones del Presidente de la República de Yibuti, se me ha denegado la renovación de mi pasaporte. Por ello, mi mujer y mis hijos no volverán a verme mientras mi pasaporte siga confiscado. Mis hijos y mi mujer ya han sido objeto de esta represión, que consiste en prohibir a un padre visitar a sus hijos y a un marido ver a su mujer en Bélgica. Eso fue de 2016 a 2019. Lo terrible para mi hija pequeña, que salió de Yibuti siendo un feto en el vientre de su madre y nació en Bélgica, fue que no pudo besar a su padre por primera vez hasta los tres años. Nunca me había visto porque me habían confiscado el pasaporte. ¿Qué puede haber más cruel que esta situación en la que un hombre que se considera Presidente de la República ataca a una mujer y a niños, personas frágiles y vulnerables? Esta es la verdadera cara del régimen en la cuestión de los derechos humanos en Yibuti.
4-La República de Yibuti tiene un territorio muy pequeño – 23.000 km² – y carece de recursos naturales. ¿En qué sectores se basa actualmente la economía del país?
TX: Nuestra población apenas llega al millón de habitantes. Desgraciadamente, el país tiene un enorme potencial que aún no se ha explotado. Por el momento, Yibuti se las arregla con sus infraestructuras portuarias, su acceso al gran mercado etíope, las rentas de sus bases militares… en resumen, actividades esencialmente terciarias.
5-El país tiene algo menos de un millón de habitantes. Su Índice de Desarrollo Humano (IDH) lo sitúa en el puesto 171. ¿Cómo explica esta situación?
TX: El tipo de régimen vigente -autoritario, opaco y familiar- explica esta lamentable y preocupante realidad. Los fondos públicos son sistemáticamente saqueados y malversados, y la corrupción se ha convertido en una forma de gobernar. Las instituciones encargadas de controlar los recursos, como la Asamblea Nacional, y las encargadas de auditar las finanzas y cuentas públicas, así como de luchar contra la corrupción, no son más que cascarones vacíos, cuyos informes quedan eternamente relegados al olvido.
Al final, es el pueblo quien sufre enormemente esta triste realidad. Y el país se dirige hacia el abismo si no se pone remedio a la situación con políticas valientes, controladas, rigurosas y exigentes.
6-El presidente Ismail Omar Guelleh lleva en el cargo desde 1999. ¿Cómo se explica esta longevidad?
TX: La ciencia política lo explica claramente. El tipo de régimen es autoritario, por lo que el poder circula menos. Es la longevidad de un poder detentado por la fuerza y el fraude electoral. Al final, ni él ni su entorno triunfarán en esta longevidad mantenida artificialmente y frente al tiempo arrasador.
7-Usted es el presidente de RADDE. ¿Puede hablarnos de su movimiento?
TX: RADDE es un movimiento prodemocrático no violento que está a la vanguardia del panorama político de Yibuti. Utiliza deliberadamente tácticas y métodos estratégicamente no violentos. El objetivo estratégico de RADDE es crear un conflicto no violento para poner fin a la dictadura, propiciar una transición inclusiva, civil y pacífica y establecer una sociedad libre, justa y democrática. Dado que Yibuti se encuentra en una región difícil e inestable, hemos elegido esta estrategia por razones pragmáticas y para transformar el conflicto no violento en una paz consolidada y positiva. Solo unas instituciones democráticas sólidas pueden salvar el futuro de Yibuti.
8-Yibuti se enfrenta a grandes problemas geoestratégicos, políticos y socioeconómicos. ¿Cuáles son los mayores retos a los que se enfrenta hoy su país y qué cree que hay que hacer para superarlos?
R TX: Estamos profundamente preocupados por la unidad nacional y la paz, que se han visto socavadas por el sistema autoritario, orientado a la seguridad, basado en la familia, injusto y opaco en lo que es, repito, una región difícil e inestable. La existencia y el futuro de la nación están amenazados por el sistema vigente. La historia de todo el mundo nos ha enseñado lo peligroso que es este tipo de sistema para la existencia de los Estados y las naciones. La única garantía de unidad, paz y progreso solo pueden ser unas instituciones fuertes, cuyos pilares sean el respeto de las libertades fundamentales, la democracia, la justicia y la igualdad ante todos los problemas políticos, económicos, sociales, etc.