Sudáfrica comenzó a exponer el jueves ante la Corte Internacional de Justicia que Israel está cometiendo genocidio contra los palestinos de Gaza. En sus alegatos iniciales, los abogados sudafricanos argumentaron que la magnitud de la violencia israelí, que ha causado la muerte de más de 23.000 personas desde el 7 de octubre, forma parte de una estrategia política y militar dirigida a destruir la vida de los palestinos, y utilizaron declaraciones de altos dirigentes israelíes para demostrar la intención genocida. Tanto Israel como Estados Unidos han rechazado vehementemente las acusaciones. Sudáfrica ha solicitado al máximo tribunal de la ONU una medida provisional para detener la campaña militar israelí, aunque la resolución final podría tardar años. Presentamos lo más destacado del primer día de alegatos en La Haya.
NERMEEN SHAIKH: Sudáfrica ha acusado hoy a Israel de actos de genocidio contra los palestinos en su discurso de apertura de una audiencia histórica en la Corte Internacional de Justicia de La Haya. En la vista, Sudáfrica ha exigido la suspensión urgente del ataque aéreo y terrestre de Israel contra Gaza, cuyo objetivo, según ha dicho, es, y cito textualmente, «la destrucción de la población del territorio». En un detallado documento de 84 páginas con el que inició el caso a finales del año pasado, Sudáfrica alegó que Israel había demostrado esa intención. El Tribunal Internacional de Justicia escucha hoy los argumentos de Sudáfrica, y el viernes escucharemos la respuesta de Israel a las acusaciones. El Ministro de Justicia de Sudáfrica, Ronald Lamola, se dirigió al tribunal en la apertura de la audiencia.
RONALD LAMOLA: Señora Presidenta y distinguidos miembros del tribunal, es un honor para mí estar aquí ante ustedes en nombre de la República de Sudáfrica en este caso excepcional. «Al extender nuestras manos a través de la distancia al pueblo de Palestina, lo hacemos con el pleno conocimiento de que somos parte de una humanidad que está unida». Estas fueron las palabras de nuestro presidente fundador, Nelson Mandela. Este es el espíritu con el que Sudáfrica se adhirió a la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio en 1998. Este es el espíritu con el que nos dirigimos a este tribunal como parte signataria de la Convención. Es un compromiso que debemos tanto al pueblo palestino como al israelí.
Como ya se ha mencionado, la violencia y la destrucción en Palestina e Israel no comenzaron el 7 de octubre de 2023. Los palestinos han sufrido opresión y violencia sistemáticas durante los últimos 76 años.
NERMEEN SHAIKH: El ministro de Justicia de Sudáfrica, Ronald Lamola, se dirigió al tribunal en la apertura de la vista. La abogada sudafricana Adila Hassim fue la siguiente. Comenzó citando la campaña de bombardeos de Israel en Gaza en su alegato inicial.
ADILA HASSIM: Durante los últimos 96 días, Israel ha sometido a Gaza a lo que se ha descrito como una de las campañas de bombardeos convencionales más intensas de la historia de la guerra moderna. Los palestinos de Gaza están siendo asesinados por el armamento y las bombas israelíes desde el aire, la tierra y el mar. También corren riesgo inmediato de muerte por inanición, deshidratación y enfermedades como consecuencia del asedio constante de Israel, la destrucción de ciudades palestinas, la insuficiente ayuda que se permite hacer llegar a la población palestina y la imposibilidad de distribuir esta limitada ayuda mientras caen las bombas. Esta conducta hace imposible conseguir lo esencial para la vida.
AMY GOODMAN: La abogada sudafricana Adila Hassim continuó exponiendo lo que, según Sudáfrica, está constituyendo una serie de actos genocidas, entre ellos asesinatos en masa, desplazamientos, denegación de ayuda humanitaria y más. Comenzó con el asesinato masivo de palestinos en Gaza.
ADILA HASSIM: El primer acto genocida cometido por Israel es la matanza masiva de palestinos en Gaza, en violación del Artículo II (a) de la Convención sobre el Genocidio. Como explicó el secretario general de la ONU hace cinco semanas, el nivel de la matanza israelí es tan amplio que no hay ningún lugar seguro en Gaza. En el momento de comparecer hoy ante ustedes, 23.210 palestinos han muerto a manos de las fuerzas israelíes a casa e los continuos ataques de los últimos tres meses, de los cuales se cree que al menos el 70% son mujeres y niños. Unos 7.000 palestinos siguen desaparecidos, presuntamente muertos bajo los escombros.
Los palestinos de Gaza sufren bombardeos incesantes dondequiera que estén. Los matan en sus casas, en lugares donde buscan refugio, en hospitales, en escuelas, en mezquitas, en iglesias y mientras intentan encontrar comida y agua para sus familias. Se los ha asesinado si no evacuaban, en los lugares a los que han huido e incluso mientras intentaban huir por rutas seguras declaradas por Israel. El nivel de matanza es tan elevado que los cadáveres encontrados se entierran en fosas comunes, a menudo sin identificar.
Sólo en las tres primeras semanas posteriores al 7 de octubre, Israel desplegó 6.000 bombas por semana. Al menos 200 veces ha desplegado bombas de 2.000 libras en zonas del sur de Palestina designadas como seguras. Estas bombas también han diezmado el norte, donde se encuentran los campos de refugiados. Las bombas de 2.000 libras son de las más grandes y destructivas que existen. Las lanzan aviones de combate letales que uno de los ejércitos con más recursos del mundo utiliza para atacar objetivos sobre el terreno.
AMY GOODMAN: La abogada sudafricana Adila Hassim concluye su intervención subrayando la necesidad de una suspensión de emergencia del ataque israelí a Gaza.
ADILA HASSIM: Todos estos actos, individual y colectivamente, forman una pauta calculada de conducta por parte de Israel que indica una intención genocida. Esta intención es evidente por la conducta de Israel de atacar especialmente a los palestinos que viven en Gaza; utilizar armamento que causa destrucción homicida a gran escala, así como ataques selectivos contra civiles; designar zonas seguras para que los palestinos busquen refugio y bombardearlas; privar a los palestinos de Gaza de sus necesidades básicas: alimentos, agua, atención médica, combustible, saneamiento y comunicaciones; destruir infraestructuras sociales: hogares, escuelas, mezquitas, iglesias, hospitales; y matar, herir gravemente y dejar huérfanos a un gran cantidad de niños y niñas.
Los genocidios nunca se declaran por adelantado. Pero este tribunal tiene el beneficio de las pruebas de las últimas 13 semanas que muestran de manera incontrovertible un patrón de conducta y una intención relacionada que justifica una acusación plausible de actos genocidas.
En el caso de Myanmar, este tribunal no dudó en imponer medidas provisionales en relación con las acusaciones de que Myanmar estaba cometiendo actos genocidas contra los rohingya en el estado de Rakhine. Los hechos de los que hoy conoce el tribunal son, lamentablemente, aún más crudos y, al igual que el caso Myanmar, merecen y exigen la intervención de este tribunal.
Cada día se producen más pérdidas irreparables de vidas, propiedades, dignidad y humanidad para el pueblo palestino. Nuestras noticias muestran imágenes gráficas de un sufrimiento que se ha vuelto insoportable de ver. Nada detendrá el sufrimiento excepto una orden de este tribunal. Sin una indicación de medidas provisionales, las atrocidades continuarán, y las Fuerzas de Defensa israelíes han indicado que tienen la intención de seguir este curso de acción durante al menos un año.
NERMEEN SHAIKH: La abogada sudafricana Adila Hassim. Le siguió el abogado Tembeka Ngcukaitobi, que describió lo que Sudáfrica dijo que eran pruebas claras de la intención genocida de Israel.
TEMBEKA NGCUKAITOBI: La omisión intencionada del gobierno de Israel de condenar, prevenir y castigar dicha incitación genocida constituye, en sí misma, una grave violación de la Convención sobre el Genocidio. Debemos recordar, señora Presidenta, que en el artículo I de la convención, Israel confirmó que el genocidio, tanto si se comete en tiempo de paz como en tiempo de guerra, es un crimen de derecho internacional, y se comprometió a prevenirlo y castigarlo como tal. El hecho de que el gobierno no haya prevenido, condenado y castigado este tipo de discurso ha servido para normalizar la retórica genocida y el peligro extremo para los palestinos dentro de la sociedad israelí.
Como ha dicho el miembro del Knesset (Parlamento israelí) Moshe Saada, del partido Likud, los abogados del gobierno comparten su opinión de que hay que destruir a los palestinos de Gaza. Cito: «Vas a cualquier parte y te dicen que los destruyas. En el kibutz, te dicen que los destruyas. Mis amigos de la oficina del fiscal del Estado, que lucharon conmigo en debates sobre cuestiones políticas, me dijeron: ‘Está claro que tenemos que destruir a todos los gazatíes'». «Destruir a todos los gazatíes».
Israel es consciente de que está causando la destrucción de la vida y las infraestructuras palestinas. A pesar de estos conocimientos, ha mantenido -e incluso intensificado- su actividad militar en Gaza.
AMY GOODMAN: Extractos de los argumentos de Sudáfrica en la histórica audiencia en la Corte Internacional de Justicia de La Haya acusando a Israel de actos de genocidio. Cuando volvamos, iremos a Johannesburgo y Jerusalén para conocer la respuesta.