El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, reafirmó su llamado al diálogo pacífico al presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
«Le extiendo la mano al presidente Obama para que hablemos y resolvamos los asuntos que tengamos que resolver entre los Estados Unidos de Norteamérica y Venezuela, en paz y sin intervención en los asuntos internos de nadie», afirmó durante su intervención en la VII Cumbre de las Américas, que se desarrolla en Panamá con la participación de 35 naciones del continente.
El jefe de Estado venezolano ratificó su rechazo a la agresión e injerencia del Gobierno norteamericano en los asuntos políticos y sociales de la nación bolivariana, que se agudizaron con el decreto ejecutivo que promulgó Obama el pasado 09 de marzo, y en el que califica a Venezuela como una «amenaza extraordinaria e inusual» para la seguridad estadounidense.
Con ello se incrementó la escalada de agresión de EEUU contra el pueblo venezolano y se desestimó la voluntad del Gobierno Bolivariano de mantener relaciones diplomáticas de respeto.
«Queremos paz y queremos conversar con los Estados Unidos para construir una relación civilizada que nos permita avanzar (…). Nadie debe intervenir en los asuntos de otros», expresó.
El Presidente venezolano instó a Obama a no seguir el ejemplo del expresidente George W. Bush, quien pasó a la historia como un mandatario que promovió el colonialismo e intervencionismo y apoyó los golpes de Estado en contra del presidente Hugo Chávez.
«Que no sea su legado la agresión contra Venezuela, el decreto, el silencio y la prepotencia», señaló Maduro.