El encuentro es «la más importante plataforma de interacción, intercambio entre partidos y movimientos sociales» de la región, dice Ana Prestes, parte de la organización.

Murilo da Silva para Portal Vermelho

El 26º Encuentro del Foro de Sao Paulo tendrá lugar del 29 de junio al 2 de julio en el Hotel San Marco, en Brasilia.

El pasado viernes (23), se realizó una conferencia de prensa online para presentar el evento. Se espera la participación del Presidente Lula, pero no ha sido confirmada, según Monica Valente, secretaria ejecutiva del Foro de Sao Paulo.

El lunes (26) se lanzó una página web del evento con el programa completo y los nombres de los ponentes de los seminarios. Habrá transmisión online, incluso como una forma de demostrar la transparencia de lo que se discute y combatir las fake news que intentan atribuirse al encuentro. El programa preliminar puede consultarse aquí.

Según lo explicado por Valente, habrá alrededor de 150 representantes de América Latina y el Caribe, de los partidos miembros del Foro, incluyendo Brasil, Argentina, Uruguay, Bolivia Chile, Colombia, Ecuador, Venezuela, Cuba, Panamá, República Dominicana, El Salvador, Nicaragua.

Como invitados, habrá aproximadamente 120 representantes de fuera de América Latina. Se trata de partidos de la izquierda europea, el Grupo Socialista Democrático de América de Bernie Sanders, partidos de África, el Partido Comunista de China, Rusia, Laos y Vietnam, entre otros.

Además, más de 300 participantes, entre militantes del PCdoB, PT e invitados de movimientos sociales, sindicales, sin tierra, juveniles y de mujeres, estarán presentes para profundizar el debate sobre el eje estratégico que es la integración regional de América Latina y el Caribe.

La secretaria de relaciones internacionales del PCdoB, que participa en la organización del evento, Ana Prestes, considera el Foro de São Paulo es «la más importante plataforma de interacción e intercambio entre partidos y movimientos sociales de toda América Latina».

Según Prestes, es precisamente por la importancia del Foro a lo largo de tantos años que el encuentro atrae la atención y la cooperación de partidos de otros países.

«Debatiremos sobre América Latina, que es un territorio de paz, uno de los pocos del mundo. Un lugar donde los pueblos y sus expresiones partidarias y movimientos pueden hablar de una agenda de paz, de una agenda de integración económica, de integración social, de integración urgente en tantas áreas de logística e infraestructura. Son pueblos comprometidos, sobre todo desde finales de los años 90, cuando las luchas antineoliberales maduraron y se convirtieron en proyectos de transformación, en proyectos de gobierno. Así que queremos que estos proyectos puedan hablar cada vez más y materializarse en procesos de integración», dijo el secretario de Relaciones Internacionales del PCdoB.

Pietro Alarcón, representante de la Unión Patriótica, partido que integra la coalición Pacto Histórico en Colombia, base del presidente Gustavo Petro, destacó que el intercambio de experiencias es fundamental para el nuevo gobierno colombiano.

«Para nosotros, que asumimos el liderazgo del ejecutivo colombiano desde agosto del año pasado, el intercambio de experiencias con otros partidos latinoamericanos que han liderado o lideran Estados, como es el caso de Brasil, es un intercambio sumamente relevante. Nos permite, a partir del intercambio de experiencias, generar algunas iniciativas a partir de este aprendizaje», dijo.

«[El debate] es fundamental para el momento en el que estamos con el presidente Gustavo Petro y la vicepresidenta Francia Márquez donde tenemos un reto, que es la construcción de la paz total en Colombia». La reunión del Foro de Sao Paulo permite el intercambio de experiencias para la conquista de esa paz total y para el conjunto de reformas que son fundamentales para el camino de la democracia plena y la participación popular», agregó Alarcón.

Visibilidad del Foro

Sobre los ataques que ha recibido el Foro de Sao Paulo a lo largo de décadas, Mônica Valente cree que el encuentro no servirá para aumentar la polarización entre izquierda y derecha en el país.

«No creemos que la celebración del Foro vaya a exacerbar o dejar de exacerbar la polarización. Lo que nos interesa y lo que acaba ocurriendo en el contexto del país que acoge el encuentro es tener una aproximación con lo que realmente es el Foro, sus debates, sus participantes, sus ideas y esperamos con ello contribuir para que aquí en Brasil las ideas del Foro se difundan tal como son», afirmó.

Para Ana Prestes, la exploración de lo que tratan los países en el Foro muestra la relevancia que ha adquirido la organización.

«El Foro será explorado porque es un tema que está presente en el debate político. Es positivo porque muestra la relevancia de este conjunto de partidos y movimientos que viene abordando los temas más complejos de la actividad política, social y económica de América Latina y el Caribe y su diálogo con el mundo.»

El colombiano Alarcón ve algo más allá de una confrontación de izquierdas y derechas. Para él, algunos sectores de la derecha han asumido proyectos económicos que se oponen a la masa popular.

«El escenario en América Latina no es de derecha contra izquierda. Es una confrontación de los pueblos que quieren democracia, bienestar, felicidad, y los proyectos enarbolados por sectores de derecha que nos han condenado y condenan a través de proyectos económicos a la marginalidad y a la pobreza. Esta es la confrontación fundamental», afirma.

Sin embargo, señala que la derecha en América Latina vive un momento de declive frente al fuerte resurgimiento de la izquierda.

«Creo que la derecha tiene motivos para preocuparse en este momento, porque ahora la izquierda tiene la iniciativa política continental. Hay un conjunto de transformaciones favorables a la izquierda que se han venido produciendo a través de frentes de unidad muy amplios».

También participaron en la conferencia Jorge Drkos, del Frente Transversal de Argentina y coordinador del grupo de comunicación y redes sociales del Foro, y Romênio Pereira, secretario de relaciones internacionales del PT.

 

El artículo original se puede leer aquí