El conflicto en Sudán provoca la pérdida de cientos de vidas, dejando a miles de heridos y afectando al país en una crisis humanitaria de gran magnitud
Al menos 550 civiles han muerto y 4.926 han resultado heridos desde que estalló el conflicto de Sudán, el pasado 15 de abril, informo el ministerio sudanés de Salud el martes.
La capital de Sudán es escenario de un conflicto entre dos generales protagonistas: el jefe del Ejército, Abdel Fatah al Burhan y Mohamed Hamdan Daglo, líder de las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR).
La crisis actual no nace a partir de este hecho, sino qué es una continuación de una serie de sucesos que han ido desestabilizando al país ubicado en el norte de África en los últimos dos años.
Desde la caída del dictador Omar Hassan El-Bashir en 2019 se ha producido un periodo de transición turbulento hacia un gobierno civil. Pero dos años más tarde fue depuesto por un golpe militar.
Los generales protagonistas unieron sus fuerzas para derrocar a los civiles, con los cuales compartían poder. Sin embargo, las diferencias surgieron.
En diciembre de 2022, se firmó un acuerdo político entre el ejército y algunos líderes civiles clave con la ayuda conjunta de la ONU, la Unión Africana y la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD).
Esta alianza permitió avanzar en la restauración de una democracia y gobierno civil en el país. Sin embargo, la economía se ha visto afectada, y la violencia armada y enfrentamientos entre comunidades han ido aumentando.
Últimos días
El último sábado la violencia provocó preocupación mundial con la cifra de 550 muertos y 4.926 heridos, y una nueva crisis migratoria. Los fallecimientos se deben también a la falta de cooperación y apoyo para muchos hospitales.
Ante este contexto, la ONU ha enviado a su máximo representante en este ámbito para dirigir y organizar los esfuerzos de ayuda.
La ayuda de la Cruz Roja llegó por primera vez este domingo, lo cual representó un alivio a las instalaciones médicas afectadas. Fueron ocho toneladas de ayuda médica enviadas a Jartum, capital de Sudán.
Aun así, las hostilidades persisten y generan una grave escasez de suministros básicos, lo que ha provocado un aumento exorbitante en el precio de los bienes esenciales, incluyendo el transporte.
El organismo advierte una catástrofe humanitaria, ya que la violencia obstaculiza el suministro de ayuda a los habitantes que quedan atrapados en sus hogares durante días.
Crisis migratoria
Miles de habitantes huyen hacia Chad, Egipto y Sudán del Sur. Desde el estallido de la guerra, se han evacuado al menos 1.000 ciudadanos extranjeros a países de la Unión Europea.
Actualmente hay entre 10.000 y 20.000 refugiados de Sudán en Chad, según su representante del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (Acnur), Laura Lo Castro.
Por su lado, el secretario general de la ONU, António Guterres, ha solicitado a ambas partes cesar la violencia y permitir que los civiles evacúen de las zonas afectadas por los combates
Riesgo de una catastrófica conflagración
En medio del conflicto, el representante de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Sudán advierte de un “alto riesgo” de accidente químico tras toma de laboratorio en Jartum.
Según la OMS, allí se encuentran muestras de enfermedades peligrosas. Algunas de ellas corren el riesgo de ser expuestas, tales como el cólera y el sarampión.
A través de una videoconferencia, el funcionario mencionó que el personal calificado “no puede acceder al centro sanitario para controlar la situación”.
El artículo completo lo puede encontrar en el siguiente link: https://www.servindi.org/actualidad-noticias/04/05/2023/sudan-conflicto-civil-deja-459-muertos-y-4072-heridos
Foto: ONU.