En esta entrevista exclusiva, Florbela Malaquias, líder del Partido Humanista de Angola (PHA), habla de la importancia de un mundo «humanizado». La política, abogada y activista es también la única mujer líder de un partido político angoleño.

¿Qué le llevó a formar el Partido Humanista de Angola (PHA) y a presentarse como candidata al Parlamento?

Qué me llevó a formar el Partido Humanista de Angola es una pregunta que me ronda la cabeza desde hace mucho tiempo. Creé el partido para que hubiera otra forma de hacer política, otra voz en el mosaico político angoleño. Los partidos tradicionales tienen una forma de hacer política que es prácticamente un conflicto permanente, es un conflicto armado desde hace muchos años, pero incluso cuando se alcanza la paz, el conflicto verbal continúa. Pensamos que era necesario tener una forma de hacer política que mirase al objetivo que es la reconstrucción de la dignidad del ser humano, porque la situación que Angola vivió durante largos y sufridos años deterioró completamente nuestra forma de vida, deterioró la dignidad de la persona, y llevó a las personas a vivir sin ninguna dignidad y esta cuestión fue relegada a un nivel no prioritario. Nos dimos cuenta de que el Partido Humanista de Angola podía ser un elemento esencial para la reconstrucción del humanismo en nuestra sociedad.

¿Cuáles son los temas centrales que conforman su gestión parlamentaria?

Se trata del humanismo, porque si miramos la vida en sociedad hay varios aspectos que nos exigen ser humanos, tanto en el acceso a la educación, a la tierra, como en la desburocratización administrativa, que impide que las personas tengan acceso a sus derechos y se realicen. Nuestros temas fundamentales son los relacionados con los derechos humanos, y nos fijamos mucho en los derechos humanos de las mujeres, que apenas se han tenido en cuenta. Estos temas son nuestra bandera para intentar humanizar nuestra sociedad.

¿Se han asociado con alguna organización social, principalmente para promover sus proyectos legislativos con apoyo popular?

No con asociaciones, pero sí con bases sociales. Nuestros miembros, los ciudadanos en general, porque aquí en Angola las asociaciones no tienen mucha tradición de apoyar a los partidos políticos.

¿Qué le parece la idea del Foro Humanista Africano, que está cobrando mucha fuerza en colaboración con Pressenza en países como Zambia y Kenia?

Me parece una iniciativa bastante interesante y probable, porque nuestras sociedades, todas ellas, están muy necesitadas de ser tocadas por el humanismo. La solidaridad ha desaparecido entre las personas, así que necesitamos volver a modelos de sociedad más solidarios y a partir de ahí más humanistas, porque no puede haber solidaridad sin humanismo. El ser humano también sólo ha llegado a donde está gracias a la solidaridad entre los seres humanos, de lo contrario no habríamos resistido las intervenciones incluso de la propia naturaleza. Pero cuando la solidaridad colapsa se produce una brecha que amenaza incluso a la humanidad en su conjunto. El objetivo del Partido Humanista de Angola, como el de todos los humanistas, es crear una red para rescatar la solidaridad.

¿Es este un proyecto al que el Partido Humanista de Angola quisiera sumarse?

Claro que sí, porque nos integramos en esta red del humanismo internacional, partiendo de Angola. Yo digo que la humanidad es un todo, y si todos nos unimos y estamos conectados para desarrollar, propagar y fortalecer los principios humanistas, la humanidad vencerá.

¿Qué tipo de apoyo del foro africano, en formación, le gustaría recibir?

Como somos un partido reciente, nos gustaría recibir apoyo en el ámbito de nuestra formación, en la difusión de nuestras actividades, en el ámbito del intercambio desde un punto de vista político y en otros ámbitos imparciales al foro.

¿Y qué tipo de apoyo, de otros humanistas, les gustaría recibir, o reciben actualmente?

Actualmente tenemos mucho apoyo. Tenemos mucha adhesión y refuerzo de nuestros temas y actividades porque, como todo, estamos en el principio. Fue un comienzo fértil porque al primer intento tuvimos dos parlamentarios, esto por sí solo denota que el mensaje humanista es muy bien recibido. El trabajo que estamos haciendo nos hace pensar que con el tiempo, en este proceso de crecimiento y movilización, podemos alcanzar cotas bastante altas.

¿Cómo es vuestra relación con los medios de comunicación? ¿Conseguís difundir vuestras propuestas e ideas o hay algún punto muerto?

No hay ningún impasse, pero hay una diferencia: durante el periodo de campaña electoral, el trato de los medios de comunicación con los partidos políticos es diferente. Ahora, fuera del periodo de campaña electoral, hay aperturas. Podemos difundir nuestros comunicados y nuestras ideas, pero no tan ampliamente. Como ahora también disponemos de otros medios tecnológicos, podemos transmitir fácilmente nuestros mensajes a través de internet.

Sí, por supuesto que internet también tiene su lado positivo. ¿Qué mensaje le gustaría enviar a otros humanistas africanos y a los de todo el mundo?

El mensaje que enviaría a todos los humanistas es que nos unamos porque la humanización de la sociedad depende de nosotros. No podemos esperar nada de quienes nos deshumanizan. Esperar que cambien o que mejoren para que los seres humanos vivan con la humanidad que se les ha dado es engañarnos a nosotros mismos. Así que nos toca a nosotros abrazar esta filosofía y esta política humanistas y unirnos para difundir este mensaje. Empezamos como un acto de valentía, así que tenemos que caminar y contar absolutamente con todos, porque sólo juntos podremos llevar a cabo esta misión que es humanizar. Yo digo «humanicemos Angola», pero también diría «humanicemos el mundo», porque el mundo está completamente deshumanizado.

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