Tras 23 años de su fundación, la Campaña Mundial por la Educación (CME) celebrará su 7ª Asamblea Mundial del 22 al 24 de noviembre de 2022 en Johannesburgo, Sudáfrica. El mayor movimiento de la sociedad civil cuya labor es el avance del derecho a una educación gratuita, inclusiva y de calidad para todos se prepara para reunirse y renovar sus estructuras de gobierno y profundizar en los debates sobre los obstáculos, retos y oportunidades existentes con el fin de superar la exclusión, la discriminación y el empobrecimiento de la educación en todo el mundo.
Esta 7ª Asamblea Mundial será el escenario perfecto para adoptar estrategias innovadoras en la lucha política que alienta al movimiento desde hace muchos años además de para trabajar en nuevas formas de acción con el fin de profundizar su influencia en todos los ámbitos de la educación y posteriormente.
La CME reúne a organizaciones, redes y coaliciones de la sociedad civil de casi 130 países, además de representar a una diversidad de actores, tales como jóvenes y estudiantes, mujeres, profesores, líderes sindicales, activistas, investigadores y académicos de todo el mundo. La CME encuentra su mayor inspiración en esta diversidad, lo que la convierte en un movimiento global con legitimidad e impacto probado.
La perspectiva de la sociedad civil sigue siendo fundamental para poder transformar la educación. Por ello, la Asamblea Mundial es un espacio ideal para debatir los cambios necesarios con el fin de superar las crisis de violencia y desigualdad que afectan a la educación, especialmente a las personas y comunidades que han sido históricamente excluidas y discriminadas durante muchos años.
Es necesario ampliar el diálogo sobre el papel de los nuevos mecanismos de gobernanza en los que participa la CME, como el Comité Directivo de Alto Nivel del ODS4 – Educación 2030, la Junta directiva de la Alianza Mundial por la Educación, y el Grupo Directivo de Alto Nivel y el Comité Ejecutivo de La Educación No Puede Esperar (Education Cannot Wait), entre otros.
La 7ª Asamblea Mundial constará de foros de debate a través en los cuales la CME profundizará en las discusiones sobre temas cruciales como la movilización mundial para lograr un nuevo pacto de financiación educativa y los marcos urgentes de transformación de género y educación inclusiva. Estos foros serán también una oportunidad perfecta para abogar por un nuevo acuerdo mundial para contrarrestar el impacto negativo de la privatización de la educación y la gobernanza mundial. El efecto negativo del endeudamiento y la fiscalidad regresiva ha impedido a los países de ingresos bajos y medios garantizar una financiación adecuada de la educación. El llevar al Fondo Monetario Internacional y al Banco Mundial a la mesa de diálogo será una medida decisiva que promoverá la CME.
La CME liderará acciones de incidencia con el fin de restaurar el papel protagonista de los docentes y de reforzar la participación de los jóvenes y estudiantes en la toma de decisiones, incluyendo la lucha contra toda forma de discriminación y exclusión y la búsqueda de soluciones a las crisis humanitarias, tales como la ocupación, que anula el derecho a la educación.
La 7ª Asamblea Mundial hará propuestas sobre cómo analizar las formas de ampliar la rendición de cuentas del Estado en materia de educación y aprendizaje permanente, a través de la incorporación del diálogo de incidencia sobre la educación de adultos y la atención y educación de la primera infancia. La CME cree que sólo el enfoque holístico podrá brindarnos la base para mejorar el impacto de la Campaña Mundial por la Educación a partir de acciones que combinen la experiencia acumulada de sus diversos miembros, en donde se incluyan las voces de los jóvenes y estudiantes, de las personas con discapacidad, de las comunidades con diversidad sexual y de las mujeres, cuya orientación dirige el movimiento hacia nuevas luchas a favor del derecho a una educación gratuita, inclusiva y de calidad para todos y todas.
Los aires del cambio que se avecina soplan con fuerza, y la 7ª Asamblea Mundial señalará el rumbo estratégico que llevará a sus miembros y socios a renovar las decisiones y acciones políticas para así poder dirigirse a un mundo de solidaridad, justicia, prosperidad y paz.