Por Andrés Figueroa Cornejo
La comunicadora social de la Señal 3 de La Victoria, Francisca Sandoval, falleció este jueves 12 de mayo. La periodista estaba siendo atendida en la ex-Posta Central de Santiago, tras recibir un disparo en la cabeza por un individuo concertado con la policía militarizada en el bandejón central de la Alameda, arteria principal de Chile, mientras reporteaba una marcha por el Día Internacional de los Trabajadores el pasado primero de mayo. El asesino, Marcelo Naranjo Naranjo, bajo prisión preventiva y con el cargo de homicidio, está siendo investigado por la fiscalía.
Los compañeros de la periodista de Señal 3 de La Victoria escribieron que, “Francisca no se nos fue. La asesinaron. A través de estas palabras confirmamos el fallecimiento de nuestra querida Fran. Te extrañaremos y haremos todo lo posible para encontrar la verdad”.
Durante los días que Francisca estuvo hospitalizada en estado de suma gravedad, un grupo de personas solidarias acampó fuera del centro asistencial, donde fueron hostigadas y reprimidas permanentemente por las Fuerzas Especiales de Carabineros.
En ese marco, otra periodista escribió que, “Desde que nuestra compañera Francisca Sandoval, periodista y comunicadora popular de la Señal 3 de La Victoria fue brutalmente atacada por delincuentes ligados a las mafias de un barrio comercial en la capital de Chile, quienes le dispararon directo al rostro en concomitancia con la policía para repeler las manifestaciones del Primero de Mayo, cada noche se ha apostado una gran cantidad de personas que se han hecho presentes para expresar su solidaridad. Cada noche se prenden velas, se protesta, se toman la calle y llegan, por cierto, las fuerzas policiales a reprimir, ahora bajo el gobierno de Gabriel Boric. Carros lanza aguas (guanacos), carros lanza gases (zorrillos), policías de a pie en un despliegue de fuerza de choque (Pacos), como si quienes estamos en las afueras del centro hospitalario fuésemos las y los criminales más buscados, más peligrosos”.
Y agregó que, “Somos periodistas, comunicadores populares, activistas defensores de Derechos Humanos, dirigentes de los territorios, brigadas de rescatistas que apoyan atendiendo heridos y heridas en la protesta y nos rescatan de las garras de la represión cada vez que pueden. Así es cada noche, nos libramos más o menos del agua con químicos, sorteamos los gases lacrimógenos, y arrancamos si vemos que vienen por nosotras, por nosotros. Y sí, hay rabia y eso es bueno, porque la rabia moviliza, la rabia nos permite hablar de futuros posibles, y dan ganas de tener con qué defenderse cuando llegan los lacayos de la ministra del Interior, Iskia Siches, los batallones de esbirros del presidente de la república Gabriel Boric, que con su discurso mediatizador, mediador, su payaseo ante las cámaras, intenta bajarle el perfil a todo”.
Asimismo, los Defensores de Derechos Humanos, Sutra, que asisten integralmente y desde hace una década a las personas que participan en las manifestaciones populares, exigieron “la más pronta investigación y condena a todos los responsables de la muerte de Francisca”.
Por su parte, el personal y el propio Hospital de Urgencia Asistencia Pública emitió un documento público donde comunicaron “el sensible fallecimiento de Francisca Sandoval Astudillo ocurrido hoy (12 de mayo de 2022) a las 10.58 AM”, y añadieron que, “La paciente ingresó a nuestro establecimiento el domingo 1 de mayo en estado de extrema gravedad producto de un traumatismo encéfalo craneano por un proyectil balístico. Fue intervenida quirúrgicamente y posteriormente se mantuvo en soporte vital avanzado durante 12 días, sin mejorías neurológicas y evolucionando a una falla multiorgánica que provocó su fallecimiento”.