Desde la antigüedad, la atención de los embarazos, partos y pospartos era realizada por matronas, también llamadas parteras. Actualmente, todavía existen diferentes formaciones que llevan a una persona a convertirse en matrona. Las matronas, enfermeras obstétricas y parteras tradicionales son profesionales con diferentes antecedentes que trabajan con el mismo enfoque; seguimiento de todo el ciclo de embarazo, parto y posparto. Promueven el cuidado y protección de esta etapa tan importante de la vida de la mujer, la mujer embarazada, el bebé y la familia, respetando y considerando aspectos más allá de lo biológico, como lo emocional, lo social y lo cultural.
Por Flavia Estevan
En el mundo occidental se ha consolidado cada vez más la idea de que “la mejor atención sanitaria”, es decir, la “atención ideal”, la debe revisar un médico. Sin embargo, en el caso de la salud materno-infantil, son precisamente las matronas las que aparecen como figuras clave para que consigamos los mejores resultados en salud perinatal.
Como ya hicimos el año pasado, REHUNO Salud apoya una vez más el Día Internacional de la Matrona, que se celebra el 5 de mayo de cada año.
Queremos compartir el manifiesto elaborado por la Confederación Internacional de Matronas para la celebración de este año:
Imagínese un mundo donde existieran las inversiones que merecemos.
Imagine parteras con un salario justo y equitativo.
Imagina matronas con protección y condiciones de trabajo justas.
Imaginen parteras no oprimidas por un sistema de salud patriarcal y diferenciadas de otras profesiones.
¿Cuánta igualdad de género lograremos?
Las matronas en posiciones de liderazgo y en los medios de comunicación garantizarían la presencia de mujeres en la política de salud.
Las políticas que permiten la partería fortalecen la atención primaria y allanan el camino para la cobertura universal de salud.
Imagine que las parteras son reconocidas como profesionales de la salud que trabajan por cuenta propia y no se las confunde con enfermeras y obstetras.
Más personas tendrían acceso a derechos sexuales y reproductivos de alta calidad, brindados por el profesional más capacitado: una partera.
Imagine matronas con igual acceso a la educación continua de acuerdo con los estándares y competencias de Confederación Internacional de Matronas . Todas las familias tendrían acceso a derechos sexuales y reproductivos profesionales culturalmente relevantes, y los resultados de salud materna mejorarían.
Imaginen parteras reconocidas por lo que son: un camino para alcanzar los derechos sexuales y reproductivos y reducir la mortalidad materna.