POEMA
Mi identidad regulada por las normas
me apresa como ave,
me encierra en un suicidio,
me limita las visiones,
me dice quién ser.
Me siento una “no ser”
que anhela sus placeres,
que goza de la libertad,
que camina erguida en su ego.
He tenido que permanecer
aún después de sentirme no identificada.
Callar ha sido la norma
Callar para que hable la expertes
Callar para que hable la autoridad
Callar para ser, quien no se quiere ser.
Abandonarme en la verdad
aquella que se lee desde el cielo,
pero nunca se abraza con la tierra.
Abandonarme en el universalismo
ese que defiendes,
pero nunca te incorpora.
Sentarme sobre la objetividad,
aquella que te cuenta,
pero en razón de valor capital.
Sentirme más que otros,
llena de documentos,
pero vacía en humanidad.
R-existir se ha vuelto mi poesía
porque mi ser está vacío.
Vacío de navegar entre verdades ajenas
Vacío por despojar identidades
Vacío por hacer que otros existan
Vacío por el autosacrificio.
R-existir es la premisa del emancipado
existes porque eres humano
existes porque tienes verdades
existes porque tu sabiduría ancestral sobrevive
existes porque resistes.