En conversación con Radio Universidad de Chile, el diputado por el Partido Humanista se refirió a cómo el Gobierno se ha manejado con la crisis producida por el brote de Covid-19. En ese sentido, calificó de incomprensible la intención de retorno progresivo de las actividades de los funcionarios públicos. “Por una parte, decretan un oficio para que se evitara trabajar y en beneficio de la salud, con sólo lo necesario para hacer funcionar el Estado, algo que ha funcionado muy bien. Eso, se contradice con el nuevo oficio, que anula el anterior. Es una decisión economicista, se refleja al ser firmado por el ministro Briones. Esto contradice, además, todos los criterios de los especialistas que piden no volver al trabajo aún”.
La situación, el diputado la califica como “delirante”, además, el que se trate de volver a clases en medio de lo anunciado como un peak de contagios. “El exitismo es lo más peligroso que nos puede pasar”, advierte Hirsch, haciendo un llamado a la responsabilidad, ha instalar miradas de largo plazo, porque no sabemos cómo seguirá avanzando esta enfermedad, sin cura conocida, correspondiendo priorizar la salud a la economía.
“Tendremos un año complejo económicamente, lo que se va a traducir en dificultades sociales, pero las medidas hay que tomarlas resguardando la salud”, agregó. “Hemos logrado que la pandemia no esté en los niveles que se pensaron. Sigamos por el camino de cuidado, de conservación, pero no podemos privilegiar la medida económica, esto es una irresponsabilidad muy grande”.
Todos alineados en pos de la salud
Para el diputado, es fundamental que todos los sectores estemos unidos con el fin de poder llevar de mejor forma esta pandemia, tanto en lo social, como en lo económico, pero principalmente en materia de salud.
En ese sentido, advirtió que le llama profundamente la atención el comportamiento del Gobierno frente a algunas iniciativas de ley que se presentan en el Congreso. Algunos ejemplos serían el proyecto suscrito por 97 diputadas y diputadas para que no se corten los servicios básicos en este contexto, cuyo resultado es la respuesta del ministro Juan Carlos Jobet, amenazando con ir al Tribunal Constitucional porque dice que se afecta el derecho a la libre competencia, lo mismo pasa con los postnatales y la posibilidad de alargarlos, o que se prohiba a las isapres subir sus planes. “¿Cómo es posible que esas cosas ocurran? ¿Que el gobierno diga que todo es inconstitucional? Si todo esto es inconstitucional, lo que corresponde no es bloquear los proyectos, sino cambiar la Constitución”.
A juicio del parlamentario, lo que ocurre es que “están chocando desde el Gobierno dos miradas: hay quienes siguen privilegiando la mirada de la economía , mientras otra releva la salud. Pero, además, se combina esta situación de exitismo, donde el Gobierno cree que todo lo puede resolver. Ejemplo de ello, es haber dejado afuera a expertos, como la Confusam o los trabajadores de la Anef, de estas instancias como la mesa social. Hay un rechazo a escuchar la voz de la ciudadanía”, dijo cuestionando la acción de las autoridades.
Para explicarlo, advirtió que privilegiar el dinero por sobre la vida es un principio ideológico, absolutamente irresponsable. “Como mínimo, uno esperaría un Gobierno que no ponga nada por encima de la salud”, advirtió dando cuenta que, por parte de las autoridades, hay una tendencia a “encastillarse” sin escuchar a quiénes más conocen de las distintas realidades del país.
Sobre el rol de la oposición, Tomás Hirsch reconoció que la pandemia encuentra a este sector político en un momento de gran fractura. “Esto parte de antes del 18 de octubre. Lo hemos evidenciado, por ejemplo, con lo que ocurre con la DC que vota a favor del gobierno. No hay una única oposición. Si bien tenemos en número una mayoría en el Congreso, somos minoría”, a propósito de la fragmentación y los distintos sectores que coexisten en la llamada oposición..
Al respecto, el parlamentario explicó que las diferencias pasan por quienes solo quieren retornar al poder, mientras están los que buscan un cambio estructural al modelo chileno. “Hay una tarea pendiente sobre qué país se está demandando construir”, sobre una construcción política que sectores de la oposición ayudaron a construir, como es el modelo neoliberal imperante en Chile.
“Las dos crisis ponen de manifiesto los grandes problemas de nuestra sociedad. Como se puso de manifiesto después del 18 de octubre que este país era una mentira”, en esto del llamado “éxito neoliberal”, donde se ocultó al “verdadero Chile”, la misma situación que ahora ocurre con la pandemia de Covid- 19 “donde ha quedado en evidencia que hay empresas que, sin necesitarlo, se acogen para dejar en suspenso los sueldos a los trabajadores, que ven cómo se consumen sus fondos de cesantía. Va quedando muy en claro que las concentraciones políticas, económicas y sociales han quedado en manos de muy pocos”.