La patrulla de la guardia costera de Bangladesh anunció que ha rescatado a casi 400 refugiados Rohingya, que se encontraban a la deriva en un gran bote en las aguas territoriales de ese país, después de casi dos meses en el mar.
Detalló que estuvieron navegando durante 58 días después de que se les negó la entrada a Malasia, cuando ese país implementó un estricto control costero debido a la pandemia del nuevo coronavirus, conocido como COVID-19. Según los rescatados, 32 Rohingya murieron a bordo del barco.
Casi un millón de musulmanes Rohingya vive en campamentos, cerca de la frontera de Bangladés con Myanmar (Birmania), de donde muchos han huido escapando de una brutal represión militar del país de mayoría budista.