El Centro de Estudios Humanistas Nueva Civilización concluyó su segunda versión de Talleres de Desarrollo Personal dirigidos a niños y adolescentes de la institución educativa Diego Ferré, en Lima, capital del Perú. “La construcción no violenta viene de dos lados, lo que lleva el grupo que facilita y el grupo que recibe, creándose ámbitos para ejercer su libertad” señalan los facilitadores.

El Taller de Verano de Desarrollo Personal se dirigió a 17 alumnos en promedio, de educación pública, entre los 12 a 17 años de edad. Este tuvo por objetivo prevenir posibles contextos violentos que puedan desarrollarse en el ambiente educativo, además de brindar soporte para los entornos familiares de los estudiantes, ya que algunos vienen de zonas deprimidas, con situaciones de estrés, violencia, entre otras condiciones desfavorables para su aprendizaje.

Las sesiones, que se desarrollaron de manera lúdica, abordaron temas centrales del humanismo como la Regla de Oro, la Reconciliación, las Virtudes, la Vocación, Acerca de lo humano, la Afectividad y la Experiencia de paz.

Talleres con experiencias internas

Los miembros facilitadores del taller fueron Erika Vicente, Rocío Vila, Doris Balvin y Cesar Huapaya,  quienes destacaron la importancia de los talleres desarrollados con los niños: “Son interesantes, porque en algún momento de sus vidas ellos van a recurrir a esos espacios que han visitado” dijeron.

Según señalan los facilitadores, “los talleres tienen que ver con experiencias internas, de trabajo personal. La idea es ampliar esos espacios internos que uno tiene y avanzar en fortaleza, fuerza, donde ellos pueden acudir a esos espacios, cuando lo necesiten”.

“Nos basamos en la internalización. La idea es que los estudiantes puedan acceder a ese mundo interno que ellos tienen. Para eso, utilizamos varias herramientas como el ludismo, crear un clima propicio de confianza, donde no se juzga sino se desarrollan los temas; también la motricidad para que los niños puedan relajar un poco el ruido externo y tengan la oportunidad de acceder al mundo interno. Y luego hacemos la profundización, con experiencias guiadas, reflexiones, pedidos o agradecimientos” indicaron.

“El vivir hacia afuera”

“Uno de los grandes retos de la educación y del ser humano actual es que vivimos ajenos a este mundo interno, nos relacionamos y vivimos “hacia afuera”, por lo tanto, eso nos juega en contra, porque no nos relacionamos desde la profundidad o desde esas experiencia. Las emociones, los pensamientos, las ideas tiene otra profundidad” destacaron los miembros del centro de estudios.

En sí, es un acto bondadoso hacerles ver a los niños y a los jóvenes, que hay un mundo interno al que pueden acceder cuando ellos quieran y puedan.

Experiencias de paz

Los niños manifestaron experimentar “paz, tranquilidad, hermandad, felicidad”, pudiendo valorar las virtudes de sus compañeros (“él es bueno en matemáticas y me gustaría ser como el”), o evocando el agradecimiento a sus familias (“mi mamá hace esto por mi” o “mi mamá es maravillosa”) en el esfuerzo conciente de ver las virtudes de los otros.

Los niños tuvieron muestras de afectividad, también se vio el buen trato (“en este taller me siento bien tratado”),  tuvieron una conexión con los temas de la regla de oro, la experiencia de paz, acerca de lo humano. “Es interesante, porque cada aspecto entra en ellos, eso ya es un plus, ya hay una experiencia y a nosotros nos motiva un montón. Cuando vengan los momentos difíciles, los niños podrán recurrir a estos, para salir de esa situación más compleja” aclaran.

Los facilitadores señalan que estos son espacios que se van generando y luego les sirven como referencias para el futuro. “El grupo educa, autoregula, contiene. Si yo voy acelerado, entonces el ámbito me regula, de manera amigable, con registro cenestésico, es decir, ni siquiera me lo dicen, simplemente sucede. Estos espacios para los niños les permite sentirse acogidos. La referencia de un buen trato no está afuera, sino adentro. El video del buen trato los sacó de cuadro, se divirtieron, fue hermoso”.

El taller de verano sobre la “No violencia” es la segunda versión de talleres de verano en la institución educativa Diego Ferré. Anteriormente, también se realizaron talleres de tutoría en las aulas durante el año escolar, aportando en la materia de Desarrollo Personal Social; además, todos los alumnos asistieron a la exposición museográfica “Paz y No violencia Ahora” en el Museo Nacional de Antropología, Biodiversidad, Agricultura y Alimentación (MUNABA) de la Universidad La Molina. Ambas instituciones se colocan a la vanguardia de estrategias innovadoras a favor de sus alumnos.