Este evento de escala global, busca recorrer entre el 02 de octubre y el 05 de enero más de 50 países en los cinco continentes. Entre el 12 y 14 de diciembre tuvo su paso por Argentina, particularmente por la provincia de Mendoza donde se resaltó el poder transformador de la acción colectiva en la búsqueda de un mundo sin violencia.

Un viaje global con impacto local.
En las dos jornadas realizadas en Mendoza, se promovió un mensaje de paz y se generaron espacios de diálogo sobre los derechos humanos, la noviolencia y la necesidad de un cambio estructural en las sociedades actuales. Además, se selló el compromiso ético y la importancia de la juventud en liderar este movimiento.

En la ciudad de Luján de Cuyo, más precisamente en el Concejo Deliberante de esa localidad, los participantes del Equipo Base tuvieron un cálido reconocimiento en el cual se declaró la 3ra Marcha Mundial como de Interés Municipal. La concejala Paloma Scalco destacó la importancia de llevar un mensaje de paz a sitios con historias difíciles, como el antiguo instituto Próvolo, ahora transformado en el Parque Cívico, donde se realizó este primer encuentro.

«Que este mensaje de paz llegue a lugares con historias tristes como este, tiene un significado especial», expresó Scalco.

Uno de los momentos más emotivos fue el testimonio de Rafael de la Rubia quien compartió su experiencia como objetor de conciencia en España durante el régimen de Franco. Este relato se conectó con la historia de Mario Luis Rodríguez Cobos, más conocido como Silo, un mendocino que inspiró a través de su compromiso con la noviolencia y que fue declarado ciudadano ilustre de Luján de Cuyo.

La Marcha también sirvió como plataforma para reflexionar sobre la violencia como una enfermedad social. Se enfatizó la necesidad de abordarla desde una perspectiva integral que incluya la salud, los derechos humanos y la educación.

Como señaló De La Rubia, «Lo extraordinario de estas acciones es que alguien se atreva a realizarlas, lo que desencadena una dinámica que va mucho más de lo allá esperado. Ya estamos pensando en la cuarta marcha».

Encuentro artístico

En horas de la tarde, tuvo lugar un encuentro lleno de conexión, donde el arte y la música se unieron para celebrar la alegría de compartir. En un espacio cargado de naturaleza, se realizó un pedido de paz, luego de una meditación profunda que invitó a la reflexión colectiva y al encuentro con el interior de cada uno. Las canciones de Rocío Monteleone y su proyecto “La perla del alba”, música en su vibración más pura, se convirtió en un canal de sanación, donde los mantras resonaron como un eco de unidad, llevando a todos los presentes a un estado de armonía y gratitud. El ritmo y la energética voz de Juscelino Vargas le puso sazón a la caída del sol con canciones populares que los presenten corearon con alegría acompañados por las teclas del maestro Quique Nomberto Bazán. Para el cierre, la interpretación folklórica del dúo Carlos Quiroga y Luis Díaz, celebraron la cultura local y pusieron a bailar a los presentes.

La jornada fue un recordatorio de que la paz y la no violencia son caminos posibles y necesarios, donde el arte y la acción colectiva tienen el poder de sanar y transformar nuestras realidades.