Namibia se alista para un momento histórico en sus elecciones presidenciales del miércoles, donde Netumbo Nandi-Ndaitwah, actual vicepresidenta, podría convertirse en la primera mujer en asumir la presidencia del país. Con casi la mitad de la población, un total de 1,4 millones de personas, inscritas para votar, las elecciones incluyen a 15 partidos políticos que competirán por la presidencia y los escaños en la Asamblea Nacional.

Según los resultados preliminares de los sondeos anticipados, la Cancillería de Namibia ha confirmado que Nandi-Ndaitwah y su partido, la Organización Popular del Suroeste de África (SWAPO), están encabezando la carrera. SWAPO ha sido el partido dominante en Namibia desde la independencia del país en 1990, cuando el país obtuvo su libertad del régimen del apartheid sudafricano. No obstante, en las elecciones de 2019, el partido perdió por primera vez su mayoría de dos tercios en la Asamblea Nacional, un golpe significativo que muchos atribuyen a las acusaciones de corrupción en la industria pesquera.

La situación del partido ha generado inquietud, y varios analistas sugieren que, aunque SWAPO y Nandi-Ndaitwah son favoritos para ganar, deben aprender de los resultados de las elecciones de 2019. Henning Melber, analista político de la Universidad de Pretoria, señaló que la pérdida de apoyo entre los votantes más jóvenes, que no tienen un vínculo directo con la lucha histórica de liberación del partido, representa un desafío crucial. Este fenómeno es algo que también enfrentan otros movimientos de liberación en África, como el Congreso Nacional Africano de Sudáfrica.

En cuanto a su campaña, Nandi-Ndaitwah ha prometido combatir la tasa de desempleo juvenil, que ronda el 20%, a través de la creación de más de 500.000 puestos de trabajo. Su propuesta incluye una inversión de aproximadamente 85.000 millones de dólares namibios (alrededor de 4.700 millones de dólares) en los próximos cinco años. Sin embargo, sus críticos consideran que este objetivo es demasiado ambicioso. Además, Nandi-Ndaitwah ha enfatizado la importancia de abordar los derechos de las mujeres, la igualdad salarial y el acceso a una atención sanitaria de calidad como parte de su plataforma.

Si Nandi-Ndaitwah llega a la presidencia, seguiría los pasos de otras líderes africanas como Ellen Johnson Sirleaf de Liberia, quien se convirtió en la primera mujer presidenta del continente en 2005, y Joyce Banda de Malawi, entre otras.

Erika Thomas, profesora de Ciencias Políticas en la Universidad de Namibia, destacó que si Nandi-Ndaitwah resulta elegida, deberá enfocarse en ser una presidenta independiente, transparente y responsable, impulsando políticas que promuevan una mayor participación de las mujeres en la política.

El partido SWAPO se enfrentará a competidores fuertes como los Patriotas Independientes por el Cambio, liderados por el ex dentista Panduleni Itula, y el partido Reposicionamiento Afirmativo, del profesor universitario Job Amupanda. Las campañas electorales llegaron a su fin este fin de semana con grandes mítines, mientras Namibia se prepara para unas elecciones que podrían cambiar el curso de su historia política.

Este evento es parte de una serie de elecciones significativas en el sur de África, donde otros países, como Sudáfrica y Botsuana, también han experimentado cambios políticos importantes. Las elecciones en Mozambique, por otro lado, han estado marcadas por la controversia y las protestas, lo que resalta la tensión política en la región.

Namibia está, sin duda, en un momento decisivo de su historia, y el resultado de estos comicios podría tener implicaciones trascendentales para el futuro del país y de la región.