Memoria de un pueblo olvidado

¿Quiénes eran los guanches? ¿De dónde procedían? ¿Dónde habitaban? ¿Por qué desaparecieron? Estas y otras preguntas referentes a los habitantes de las Islas Canarias, han quedado en el olvido de nuestra historia. No se estudian a estos pueblos que fueron conquistados por la Corona Española, eslavizados, exterminados culturalmente, en un genocidio hasta el punto que no quedó nadie, sólo algunos vestigios de su existencia. Es cierto que hubo unión entre ellos, mezcla de culturas y que desde el Reino de España quisieron que fueran tratados como ciudadanos con derechos. Pero al ser unas islas alejadas de la península, las misivas reales se perdían en las millas que separaban ambos lugares.

Muchas veces se hace referencia sobre lo ocurrido en la conquista del “nuevo mundo” por parte de los conquistadores, pero se ignora la otra más cercana, la de los primeros canarios que vivían en cómodas cuevas y donde sus vidas se desarrollaban en armonía hasta la llegada de los hombres blancos que implantando a la fuerza su Dios, arrasó las nuevas culturas y les llevaron a la esclavitud y el exterminio. Hoy en la actualidad, aún quedan pueblos indígenas que han sobrevivido valientemente al empuje abusivo de los conquistadores y posteriormente de los que se independizaron formando naciones. Sin embargo en Canarias, los guanches fueron brutalmente dominados. No existen referencias antiguas que hayan escrito sobre su cultura y el desarrollo de la sumisión de un pueblo a otro, como ha existido en otras conquistas. La razón según algunos investigadores es que estaba prohibido escribir sobre ellos bajo pena de la inquisición. ¿Qué ocurrió? Se sabe que Tenerife fue la última isla en ser sometida y se sabe también, que como siempre en todas las conquistas, muchas de estas victorias fueron realizadas por el apoyo de pueblos que no se llevaban bien por diferentes razones y se unían a los recién llegados con esperanzas de venganza y que al final también eran dominados.

Tampoco se sabe con seguridad de donde procedían los guanches. Si eran vikingos, atlantes o si procedían de África. Existe mucha controversia en este sentido y aún no se ha llegado a una conclusión verídica. El silencio histórico de sus conquistadores y el olvido a lo largo del tiempo de esta realidad marginal, han contribuido sin duda a su olvido. José Luis Concepción en su libro “Los guanches que sobrevivieron y su descendencia” publicado en 1982 por ACIC (Asociación Cultural de las Islas Canarias) nos dice que: “Siempre se ha mantenido el máximo silencio acerca de la población guanche, o mejor dicho, lo que se sabía no se podía publicar porque no convenía que el pueblo supiera la verdad”. Sobre la historia de las Islas Canarias en los primeros años después de la conquista dice que: “Sólo se limitaron a hacer referencias a los hechos principales, aunque de forma incorrecta. Es difícil pensar que no hubo ni siquiera un misionero o historiador que se interesara en contar todos los hechos ocurrido” Es cierto que han perdurado algunas costumbres que utilizaban los guanches, pero prácticamente su cultura ha sido borrada de las islas y de la historia española.

Existen relatos de escritores que han puesto de protagonistas a los guanches y por ello hemos conocido un poco de su cultura, además de las investigaciones realizadas en las propias islas canarias sobre los antiguos habitantes de las mismas. Sin embargo, numerosos vestigios que aún quedan diseminados por las diferentes islas, se encuentran abandonados, sin protección alguna como trataré más adelante.

Salvador López, en su libro “Las islas  canarias a través de la historia”, publicado en su primera edición en 1971, nos dice que: “La raza guanche, predominante sobre todo en Tenerife, existía en todas las islas, y debe considerarse como la primitiva que pobló el archipiélago. Hay algunos autores que le atribuyen un origen egipcio, fundado en la semejanza de procedimientos para momificar los cadáveres. Otros les señalan una procedencia cartaginesa o vikinga, por la frecuencia de los viajes de éstos. Y por último, algunos les dan un origen autóctono como restos del pueblo que habitó la desaparecida Atlántida. Teoría ésta que vuelve a tener muchos partidarios por ser considerada actualmente como posible la existencia  del tan discutido continente”.

Lo que es cierto sin duda, es que desconocían la navegación tal como se conocía en la época en la que fueron conquistados.

Pocos son los escritores históricos que han relatado historias de estos peculiares habitantes canarios que algunos los describen como hermosos, altos y fuertes. “Garoé”, escrito por Alberto Vázquez-Figueroa o recientemente “Los siete reinos” escrito por Santiago Díaz, son un ejemplo de ello. Nula es la historia que se enseña de ellos en los colegios cuando se habla de la historia de España.

Los grandes olvidados

 A pesar de su importancia en la historia de las Islas Canarias, los guanches han sido a menudo ignorados o marginados en los relatos históricos dominantes, que se han centrado más en los colonizadores europeos. Sin embargo, en las últimas décadas ha habido un creciente interés en revivir y preservar el legado guanche. Investigadores, arqueólogos y movimientos sociales han luchado por reivindicar la identidad y la cultura de los antiguos habitantes de las islas.

Este interés ha dado lugar a la creación de museos, exposiciones, y la conservación de restos arqueológicos que cuentan la historia de los guanches. Las investigaciones en torno a su genética, cultura y relación con otras civilizaciones continúan arrojando luz sobre su historia. Los guanches, lejos de ser olvidados, empiezan a ser reconocidos como una pieza clave en el entendimiento de la historia de las Islas Canarias, pero sólo a nivel de la Comunidad Canaria.

El olvido de los guanches es un reflejo de cómo muchas civilizaciones indígenas en todo el mundo han sido relegadas al margen de la historia oficial, desplazadas por la narrativa de los conquistadores. Rescatar su historia no solo es un acto de justicia, sino también una oportunidad para aprender de su relación con la naturaleza y su capacidad de adaptación en un entorno tan particular como las Islas Canarias.

Sin embargo, aunque los guanches como cultura y civilización autónoma desaparecieron, estudios recientes han demostrado que su legado genético sobrevive en los canarios modernos. Esto significa que, aunque los guanches fueron derrotados y asimilados, no fueron totalmente exterminados.

Imagen de Pedro Pozas Terrados – IA

¿Qué ocurrió con los guanches tras la conquista?

 Conquista y asimilación forzada: Tras la conquista española, la resistencia de los guanches fue duramente reprimida. Muchos fueron asesinados en combate o esclavizados y vendidos fuera del archipiélago. No obstante, la conquista fue un proceso complejo y no un exterminio total. Algunos guanches se integraron en la sociedad colonial, adoptando la religión, idioma y costumbres de los conquistadores.

Mestizaje: Una de las consecuencias más importantes de la colonización fue el mestizaje entre los colonos europeos, los guanches y posteriormente esclavos africanos traídos a las islas. El mestizaje diluyó la identidad guanche, pero su huella genética persiste. Estudios recientes han confirmado que un porcentaje significativo del ADN mitocondrial (heredado por vía materna) en los canarios actuales tiene origen guanche, lo que sugiere que las mujeres guanches tuvieron descendencia con los colonos europeos. Este mestizaje se dio, en particular, entre las mujeres guanches y los colonos españoles, ya que los hombres guanches fueron, en su mayoría, exterminados o esclavizados durante y después de la conquista.

Esclavitud y enfermedad: Los guanches fueron objeto de esclavitud masiva, especialmente en los primeros años de la conquista. Muchos fueron vendidos a otras partes del imperio español o murieron debido a las duras condiciones de trabajo. Además, las enfermedades traídas por los colonizadores, como la viruela y el sarampión, diezmaron la población guanche, ya que no tenían inmunidad ante estos patógenos.

Religión y cultura: Tras la conquista, se inició un proceso de evangelización forzada, y la religión, la lengua y las tradiciones guanches fueron gradualmente sustituidas por las impuestas por los españoles. La cultura guanche se fue perdiendo con el tiempo, aunque algunos vestigios sobreviven en las tradiciones populares, como ciertas prácticas agrarias y festividades.

 

El caso de los guanches es un recordatorio de cómo la historia tiende a olvidar a las culturas indígenas que fueron conquistadas y asimiladas por fuerzas coloniales. Reivindicar su historia, darle espacio en la narrativa global, y recordar su resistencia y resiliencia frente a la conquista es un acto de justicia histórica. Los guanches fueron, sin duda, grandes olvidados, pero también fueron parte esencial en la configuración de la identidad canaria moderna.

Aunque existe una huella genética guanche en la población canaria moderna, sin embargo no queda ningún grupo guanche como tal, es decir, no hay un pueblo o comunidad que haya mantenido su identidad étnica, cultural y social de forma intacta, como ocurre con los pueblos indígenas actuales en otras partes del mundo. A diferencia de los pueblos indígenas que han sobrevivido a la colonización manteniendo elementos fundamentales de su cultura, los guanches fueron asimilados de una manera tan intensa que no queda un grupo étnico reconocido oficialmente como descendiente directo y culturalmente diferenciado. La asimilación forzada, el mestizaje, la esclavitud, y la desaparición de su lengua y religión hicieron que, a lo largo de los siglos, el pueblo guanche desapareciera como identidad reconocible.

Esto contrasta con otros grupos indígenas que han sobrevivido y continúan resistiendo la homogeneización cultural, defendiendo su derecho a la autodeterminación y a la preservación de su herencia ancestral. Los guanches, sin embargo, fueron una de esas culturas que, tras el impacto del colonialismo europeo, quedaron diluídas en la nueva sociedad impuesta.

Imagen de Pedro Pozas Terrados – IA

Causas de la desaparición cultural de los guanches:

Violencia durante la conquista: A diferencia de algunos pueblos indígenas que resistieron durante siglos o lograron mantener enclaves culturales, la resistencia guanche fue feroz pero breve. Las guerras de conquista diezmaron a gran parte de la población masculina, lo que contribuyó a una ruptura radical de la continuidad cultural.

Esclavización: Muchos guanches fueron esclavizados y llevados fuera del archipiélago, lo que dispersó aún más a su población y aceleró el proceso de desaparición de su cultura. Aunque el mestizaje se dio principalmente entre las mujeres guanches y los colonos, la esclavitud redujo significativamente el número de guanches puros que podrían haber mantenido sus tradiciones.

Imposición religiosa y cultural: Tras la conquista, la evangelización forzada jugó un papel importante en la desaparición cultural de los guanches. Su religión y costumbres fueron suprimidas rápidamente y sustituidas por el cristianismo, lo que resultó en una pérdida irreparable de su herencia espiritual.

Pérdida de la lengua: La lengua guanche desapareció rápidamente, ya que no hubo un esfuerzo significativo para preservarla. Este factor fue crucial en la disolución de la identidad guanche, ya que la lengua es un vehículo fundamental para la transmisión cultural.

Mestizaje: El mestizaje con los colonos españoles y más tarde con esclavos africanos trajo consigo una integración biológica, pero también cultural. La asimilación y la adopción de las costumbres europeas se aceleraron, diluyendo gradualmente la identidad guanche hasta que desapareció como un grupo culturalmente diferenciado.

Históricamente, la falta de crónicas antiguas sobre los guanches y los habitantes de las Islas Canarias se debe a varios factores:

Aislamiento Geográfico: Las Islas Canarias están situadas en el océano Atlántico, lo que las hacía relativamente aisladas de las civilizaciones más avanzadas de la época, como las de Europa y el norte de África. Esto limitó el contacto y la documentación de su cultura por parte de otros pueblos.

Tradición Oral: La cultura guanche era principalmente oral, lo que significa que sus historias, tradiciones y conocimientos se transmitían de generación en generación a través de la palabra hablada, en lugar de ser registrados por escrito. Esto contribuyó a la pérdida de información cuando la cultura guanche fue desplazada por la colonización.

Conquista y Colonización: La llegada de los conquistadores españoles en el siglo XV resultó en la rápida subyugación y asimilación de los guanches. Durante este proceso, muchas de sus tradiciones y conocimientos se perdieron, y los conquistadores no siempre documentaron de manera detallada la cultura indígena.

Destrucción de documentos: En algunos casos, los documentos que podrían haber existido fueron destruidos o perdidos a lo largo del tiempo, ya sea por guerras, desastres naturales o la falta de interés en preservar la historia indígena.
Enfoque en la Conquista: Las crónicas de la época se centraron principalmente en los eventos de la conquista y la colonización, así como en las hazañas de los conquistadores, en lugar de en la vida y cultura de los guanches.

Imagen de Pedro Pozas Terrados – IA

Los restos de cuevas y asentamientos guanches, que en muchos lugares del  archipiélago canario se encuentran totalmente abandonados y de los que he sido testigo de ello,  pueden estar olvidados por varias razones:

Destrucción y deterioro: Con el tiempo, muchos de estos sitios han sido dañados por la erosión natural, el clima y la actividad humana. La construcción moderna y el desarrollo urbano también han llevado a la destrucción de sitios arqueológicos.
Falta de investigación: Aunque ha habido estudios sobre la cultura guanche, no todos los sitios han sido excavados o investigados a fondo. La arqueología requiere recursos y tiempo, y algunos lugares pueden no haber recibido la atención necesaria.

Desconocimiento: Muchas personas pueden no estar al tanto de la importancia histórica de estos sitios. La educación sobre la historia indígena de las Islas Canarias no siempre se ha enfatizado, lo que puede llevar a un olvido cultural.
Cambio de prioridades: A medida que las sociedades evolucionan, a menudo se priorizan otros aspectos de la cultura y la historia. Esto puede hacer que los restos guanches queden en un segundo plano en comparación con otros elementos de la historia canaria.

Falta de protección legal: En algunos casos, los sitios arqueológicos no están adecuadamente protegidos por leyes que salvaguarden el patrimonio cultural, lo que puede llevar a su deterioro o destrucción.

Es importante que se realicen esfuerzos para preservar y dar a conocer estos sitios, ya que son una parte valiosa de la historia y la identidad de las Islas Canarias. La concienciación y la educación son clave para mantener viva la memoria de los guanches y su legado.

Se hace necesario que esta niebla del tiempo que cubre los orígenes y la historia de los pueblos originarios de las Islas Canarias, sea disipada en nuestra historia, sea estudiada en los libros del colegio como se puede estudiar la conquista del nuevo mundo. Que la memoria de este pueblo tan cercano a nosotros geográficamente, deje de estar en el olvido y forme parte fundamental de nuestra historia, haciendo justicia de la verdad de un pueblo sometido y que además fue utilizado como esclavos en las nuevas tierras conquistadas de América.  Los barcos que salían de la península, su primera parada de abastecimiento eran en las Islas Canarias, para desde allí  dar el salto a la otra orilla del inmenso  Océano Atlántico.

Se lo debemos a los canarios actuales, a la historia, a los habitantes originarios del archipiélago canario, a la historia verídica y sobre todo a las generaciones futuras.