¿Quién hablaba de catástrofe? Todos, especialmente el gobierno que  no lo decía pero lo pensaba y lo creía.
Estaban muertos de susto, y ahora lo confiesan. Álvaro Elizalde lo ha dicho claramente: “Todos los vaticinios que se habían hecho respecto de un eventual desfonde o una debacle del progresismo, no acontecieron.”
Y la verdad es que el gobierno se creía perdido, ya veía a Boric defenestrado y a un facho como nuevo presidente. ¿Y por qué creían eso?
Pues porque leen El Mercurio, qué otra cosa van a leer si no hay otra prensa en Chile. Los diarios o páginas internéticas no las leen porque no les gustan las críticas y ni siquiera las propuestas razonables.
Y el susto es muy mal consejero y les recomendó virar hacia la derecha para tener algún amigo. Y nunca hablan de pueblo ni le hablan al pueblo, porque eso es de mal gusto.
Y al gobierno no le fue tan mal pero tampoco muy bien, porque perdieron las alcaldías de Santiago centro, de Ñuñoa y varias otras, pero al lado de la calamidad que esperaban, esos son pelos de la cola.
Ahora, un par de días después, todos dicen que ganaron y que los contrarios se fueron al diablo. Cada uno saca ejemplos muy parciales: perdieron la alcaldía de Santiago…. perdieron a Marcela Cubillos en Las Condes, que es el gran reducto de la derecha. Antes el gobierno tenía 14 alcaldías en las comunas más pobladas y ahora sólo tiene 7, etc.
Pero la conclusión que a mí me ha dicho la gente que sí sabe, es que a todos les fue reguleque, nadie es el gran ganador ni hay un gran perdedor, en suma todo queda igual.
Importan las alcaldías pero no importan los gobernadores, creados hace poco y que nadie sabe para qué sirven.
Tres compañeros comunistas muy conocidos y muy respetados, Miguel Lawner, Manuel Riesco y Hugo Facio mandaron una carta abierta a su militancia, hace meses, cuando se estaba realizando el Congreso del Partido Comunista de Chile. Esa carta se hizo pública sólo hace unos días, y propone cosas muy razonables y necesarias que podría hacer el gobierno. No las pongo aquí para no alargarme y porque se pueden ver en internet.
No parece que esta carta se haya discutido en el congreso del P.C. o que haya sido contestada o atacada. En suma, quedó para las calendas griegas, lástima.
O sea lo que realmente interesaba: de estas elecciones municipales no salió, el próximo candidato a Presidente. Todo está por verse.
Y yo agrego: y todo sigue mal porque el gobierno es pésimo y después de estas elecciones municipales será peor porque no les fue tan mal como esperaban.
Entonces ¿Qué hacer? Eso se lo preguntaba Lenin y siempre nos lo volvemos a preguntar. El libro no nos da la respuesta exacta, porque primero hay que saber “Por dónde empezar”, otro libro de Lenin.
¿Por dónde deberíamos empezar ahora a corregir el desastre que es Chile? Díganlo ustedes, por favor.