La primera Presidenta de los Estados Unidos Mexicanos asume este 1 de octubre. Científica, activista universitaria, proveniente del mundo de la izquierda mexicana, llega con los “100 puntos del proyecto de Nación” como objetivos de su mandato. Ya planteó una gestión que evite “el exceso de pragmatismo sin principios” y la necesidad de “la movilización social para defender los derechos del pueblo”. Refrendó la idea de “Por el bien de todos, primero los pobres” y expresó que “no llego sola, llegamos todas. Con las heroínas que nos dieron patria, nuestras ancestras, nuestras madres, nuestras hijas y nuestras nietas”. Remarcó que “concebimos un México plural, diverso y democrático” y auguró: “Téngalo por seguro, estaremos a la altura de nuestra historia”.
Por Hugo Guzmán
1.-“Voy a vivir en Palacio. Yo no tengo casa propia donde vivir”. Así será. La científica Claudia Sheinbaum Pardo (62 años), llegará este 1 de octubre a las habitaciones del Palacio Nacional, en el Zócalo de la Ciudad de México, ejerciendo como la primera mujer Presidenta de los Estados Unidos Mexicanos, agregando otro dato histórico: ser la candidatura presidencial más votada en la historia del país, al obtener casi el 60% de los sufragios en las pasadas elecciones del 2 de junio.
2.-Ella llega a construir “el segundo piso” del proyecto de la Cuarta Transformación, después de que el ahora expresidente Andrés Manuel López Obrador construyera el primero. La definición conceptual del proceso de cambios profundos que se liga a tres períodos anteriores en la historia mexicana: la Independencia de México, la Revolución Mexicana y el período de reformas progresistas promovidas por Benito Juárez. Claudia Sheinbaum plasmó sus intenciones en “100 puntos del proyecto de Nación” que apuntan a consagrar en su país una “República justa, honesta, libre, participativa y responsable; fraterna, educadora, humanista y científica; lectura y cultural; sana; con vivienda; de y para las mujeres; con trabajo y salario justo; rural, justa y soberana; con energía sustentable, próspera y conectada, que protege el medioambiente y sus recursos naturales; con derecho al agua; segura y con justicia”. Le dará continuidad a un precepto clave en lo definido para los gobiernos de la Cuarta Transformación y que caló muchísimo en la ciudadanía mexicana, sobre todo en los sectores populares: “Por el bien de todos, primero los pobres”. En días recientes la nueva Presidenta de México apuntó a criterios que prevalecerán en su administración y que deberían asimilarse en las fuerzas políticas que la respaldan. Como que la política es de principios, pero también es eficacia, y evitar “el exceso de pragmatismo sin principios”. “La movilización social para defender los derechos del pueblo de México y la consolidación de nuestro pensamiento debe seguir siendo nuestra fortaleza”, enfatizó. Reiteró el compromiso de luchar siempre “contra la discriminación, el racismo, el clasicismo, el machismo” y señaló que “lucharemos hasta el último día de nuestras vidas, porque las y los mexicanos puedan comer tres veces al día comida saludable; puedan tener acceso a la educación, a la salud, al vestido y la vivienda. No creemos en el consumismo, ni en el poder del dinero, ni en la avaricia. Y no, no nos arrodillamos nunca frente al poder del dinero, ni frente a ningún poder extranjero”.
3.-El perfil personal de Claudia Sheinbaum puede explicar con mucho su sensibilidad política, su perspectiva de proyecto-país y sus experiencias. Viene de una familia de izquierda que participó en movimientos sociales, su padre fue militante del Partido Comunista Mexicano, ella participó de movimientos estudiantiles y fue activista del Consejo Estudiantil Universitario (CEU) que a fines de los ochenta promovió reformas estructurales en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y protagonizó una de las huelgas más emblemáticas de esa casa de estudios. Fundadora del partido Morena (Movimiento de Regeneración Nacional), fue alcaldesa de Tlalpan y luego Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, siempre promoviendo proyectos de corte social y de transformación. Es licenciada en Física de la Universidad Nacional Autónoma de México y tiene un Doctorado en Ingeniería en Energía, integrante de la Academia Mexicana de Ciencias y del Sistema Nacional de Investigadores. “Científica, humanista, con profundo amor a mi patria y a mi pueblo” se autodescribe en su cuenta de Instagram. Cuando ganó la elección presidencial expresó que “no llego sola, llegamos todas. Con las heroínas que nos dieron patria, nuestras ancestras, nuestras madres, nuestras hijas y nuestras nietas” y remarcó que “concebimos un México plural, diverso y democrático”. Auguró: “Téngalo por seguro, estaremos a la altura de nuestra historia y a la altura del generoso y gran pueblo de México”. Como dicen en México, ahora comienza la talacha.