Hace catorce años, un 16 de setiembre de 2010, Silo abandonó nuestro plano espacio-temporal, pasando a la inmortalidad.

Su paso por la Tierra deja una estela de bondad y lucidez, un mensaje profundo y un proyecto brillante para las generaciones actuales y futuras, la humanización del mundo.

El Maestro Silo, un guía espiritual, una personalidad legendaria que vive y vivirá por siempre en el corazón de las personas y en las páginas principales de la Historia.

Le recordamos cada día con enorme agradecimiento, similar al expresado por el profesor humanista ruso Boris Koval en su «Carta a Silo», enviada a su familia poco después de su partida.

CARTA A SILO DE BORIS KOVAL

Querido Mario:

Antonio me informó que usted ha partido de este mundo, ahora vivimos en diferentes esferas, pero siento que nuestro contacto espiritual y moral, nuestra amistad y simpatía no desaparecen y no pueden desaparecer jamás. Usted y nosotros sus amigos continuamos realizando su proyecto en formas diferentes: usted en otros espacios y nosotros en la tierra trabajamos por humanizar la vida y liberar al ser humano de todo mal y sufrimiento.

Yo pienso que solamente después de la muerte de un hombre la gente puede apreciar el sentido real de la vida de este hombre. Porque durante la vida normal de trabajo cotidiano día a día y hora por hora es casi imposible apreciar la magnitud de la obra de otros. Ahora cuando yo pienso sobre usted sobre su vida y su trabajo, entiendo mejor y más profundamente qué figura excepcional es usted, no solamente para mí sino para muchos.

Yo quisiera expresar a usted porque yo lo amo y porque me invade un profundo sentimiento de agradecimiento al destino, por haber tenido la felicidad de tener contacto con usted. Antes, fue imposible explicar mi amor y agradecimiento porque usted es una persona muy modesta y no espera reconocimientos. Mis palabras no son un análisis sino un testimonio sincero de la importancia y significación de su vida para mí.

Querido Mario, permítame decir algo sobre su carácter como ser humano. Usted es una persona muy normal, muy modesta, muy vital, simpática, sincera, muy viva; su energía espiritual y su sinceridad moral son, sin embargo, tan extraordinarias que yo quisiera hablar de usted como una persona carismática. Carisma es un fenómeno, simbólico y moral, y es difícil explicar su estructura. Pero hombres carismáticos como usted tienen la capacidad extraordinaria de crear y organizar algo nuevo en la vida, algo que antes no existía.

Permítame decir algo sobre sus cualidades excepcionales, que en su conjunto configuran su carisma. Usted es un filósofo, pensador, psicólogo, un conocedor de la ciencia. Una persona con un intelecto brillante y también un corazón abierto y cálido. Su contribución a la filosofía la entiendo como una forma superior y original de toda la filosofía existencial contemporánea, especialmente en la esfera de la filosofía antropológica humanista. Sus nuevas ideas, métodos, definiciones, términos científicos y estilo de pensar y escribir son excepcionales y ahora nosotros difícilmente podemos encontrar otra figura de tal magnitud.

Usted continúa la línea de Protágoras, Platón, Aristóteles, Erasmo y otros pensadores brillantes pero en la situación de hoy. Usted no repite las ideas de estas figuras, pero produce una filosofía nueva que puedo caracterizar como ciencia de la vida humana; el nuevo humanismo.

Querido Mario, usted no es solamente un filósofo abstracto sino práctico y también un psicólogo. Psicólogo de la evolución, del futuro y de la superación de la conciencia humana. La combinación de la filosofía y psicología da posibilidad de organizar una práctica nueva, una posición nueva, unas posibilidades de vivir de una manera nueva en el sentido espiritual, moral, político, familiar, social, cultural y otros.

Gracias a su actividad y a su energía en el mundo surge y continúa viviendo y funcionando el movimiento humanista como fuerza social orgánica, al mismo tiempo sus ideas expresadas en el nuevo humanismo reciben más y más popularidad y apreciación en diferentes países, por ejemplo en mi país, Rusia.

Toda la gente, todos los rusos que tuvieron contacto personal con usted o conocieron sus trabajos piensan y sienten en una forma nueva los eventos actuales, la vida actual.

En este contexto, mi querido amigo, yo considero a usted como mi maestro, como una persona que yo amo y quisiera entender muy profundamente y quiero declarar que su influencia en mi corazón y en mi cabeza es más grande y más orgánica que todos los trabajos de los teóricos marxistas que estudié por muchos años de mi vida.

Usted para mí es un guía y una fuente de inspiración y siento un profundo agradecimiento por todo esto.

Por eso, mi querido amigo, no es muy importante que vivamos en diferentes mundos porque conjuntamente continuamos nuestras luchas y trabajos en favor de los más altos valores del humanismo.

La situación de hoy es difícil, hay muchos problemas nuevos y no es fácil entender el sentido de estos problemas y buscar la alternativa, por esto yo estoy siempre consultando con usted sobre aspectos actuales y encuentro así ideas para responder a estos problemas y es muy interesante y fructífero para mí discutir permanentemente con usted los aspectos nuevos de la vida actual. Sin su enseñanza realmente no tengo hoy otros apoyos.

Todos los amigos rusos enviamos a usted nuestro saludo. Su imagen y enseñanza constituyen para nosotros factores principales de nuestra vida.

Hasta pronto

Boris

El Dr. BORIS KOVAL, Doctor en Historia, fue director del Instituto de Politología de la Academia de Ciencias de la URSS y del Instituto de América Latina de la Academia de Ciencias de Rusia. Dirigió también el Centro de Investigaciones Civilizatorias Comparadas de la Academia de Ciencias de Rusia. Escribió numerosos libros, entre los que se destacan: “La pobreza en Latinoamérica: análisis, propuestas y perspectivas”, “El sentido de la vida, discusiones y reflexiones”. Fue miembro fundador del Centro de Estudios Humanistas de Moscú y vicepresidente de la internacional humanista. Dejó nuestro mundo poco antes de cumplir 86 años, el 3 de junio de 2016.