Este 12 de septiembre, los pobladores de los campamentos de la localidad de San Antonio, V región-costa, asentados allí desde hace 5 años, marcharon desde los cerros y quebradas hasta el acceso al puerto para exigir su radicación definitiva y el término a las amenazas de desalojo.
De acuerdo al petitorio de los campamentos unificados en la protesta, «El objetivo es plantear nuestras inquietudes y soluciones, como pobladores y pobladoras de las diferentes comunidades de la mega toma del Cerro Centinela de San Antonio – Cartagena, quienes nos encontramos con una orden de desalojo debido a un recurso de protección y a una resolución que así lo determina. Tratando de dar una solución real a nuestro problema habitacional, debemos aclarar que todo lo que hemos hecho para vivir mejor, como nuestras casas, las calles, centros sociales, plazas, espacios comunitarios y áreas verdes, ha sido construido para proteger la naturaleza y la vida de barrio».
Asimismo, la misiva precisa que «Tenemos claridad que la expropiación de los terrenos por parte del Estado es una solución real y posible contra el desalojo, tomando en cuenta además que los dueños del terreno están dispuestos a vender» y agrega que «debido a la crisis habitacional nacional existente, exigimos la rectificación de la modificación de la ley 20234, que derivó en la ley 21477 que nos deja fuera de plazo y de la posibilidad para regularizar y urbanizar nuestras comunidades Necesitamos una pronta solución habitacional íntegra, incorporando a los ministerios de Vivienda, de Educación, Salud, de la Mujer y Equidad de Género, de Deporte, y de Bienes Nacionales, ya que la superpoblación de la provincia San Antonio requiere actualizar el financiamiento de dichas carteras».
Por su parte, uno de los vecinos del campamento Placilla, Braulio, expresó que «hoy los campamentos de San Antonio están angustiados por el inminente desalojo y se unen para marchar contra el desalojo de nuestros sueños para derribar lo que hemos construido».
«Como ha sido histórico, los pobladores, el pueblo, nos vemos en la necesidad de tomarnos terrenos para edificar nuestro techo, nuestra casa. El avance del ultraliberalismo y su concierto de transacciones que benefician inmobiliarias y criminalizan la lucha por la vivienda buscan cada vez más acorralarnos, y ahora con la ley anti toma quieren que vivamos en la calle», manifestó Braulio y añadió que «marchamos por las principales calles de San Antonio hasta reunirnos en el acceso al puerto con el fin de interrumpir esta máquina portuaria y defender nuestras viviendas, nuestra comunidad, nuestras familias, nuestros amigos».