Hoy celebramos el día internacional de la Luna, pero ¿Por qué un día dedicado a la Luna?

Las Naciones Unidas declararon el 20 de julio como Día Internacional de la Luna a través de la resolución 76/76 sobre “Cooperación internacional en la utilización del espacio ultraterrestre con fines pacíficos” en 2021.

Este nuevo día internacional pretende rememorar el aniversario del primer aterrizaje del ser humano en la Luna como parte de la misión Apolo 11

Datos rápidos sobre nuestra Luna
¿Si hay tantas lunas por qué se denomina a la nuestra también ‘Luna’? Hasta que Galileo Galilei no descubrió en 1610 cuatro lunas que orbitaban Júpiter, la humanidad pensaba que la nuestra era la única. Aunque ya en 1609 Thomas Harriot fue la primera persona en usar un telescopio dirigido al cielo y crear los primeros mapas de la luna. Su nombre es el producto de la voz latina Luna -empleada por los romanos y Artemisa y luego Selene, por los griegos-. Este origen clásico de la palabra latina luna era una contracción de lucina, que al igual que lux (luz) procedían de la raíz indoeuropea leuk-. Así, originalmente, la voz luna significaría «la luminosa, la que ilumina».

Nuestro satélite se aleja de la Tierra a razón de 3,8 cm por año. ¿Cómo tenemos esta exactitud de datos? Gracias a que los astronautas y las naves que consiguieron alcanzar la Luna en el pasado, dejaron cinco reflectores en la superficie. Así, al lanzar un pulso láser hacia estos espejos desde la Tierra, este rebota y vuelve hacia nosotros con el dato. La precisión es de 1 milímetro.

Es muy probable que el núcleo de la Luna sea muy pequeño, apenas del 1 al 2% de la masa del satélite y aproximadamente 680 km de ancho. Se cree que está compuesto principalmente de hierro, pero también puede contener grandes cantidades de azufre y otros elementos. Su capa rocosa de 1.330 km de espesor está formada por rocas densas ricas en hierro y magnesio. La corteza en la parte superior tiene unos 70 km de profundidad y la región más externa está fracturada y mezclada a causa de todos los grandes impactos que ha recibido la Luna.

La Luna tiene una atmósfera muy delgada, por lo que una capa de polvo o una huella pueden permanecer sin ser perturbadas durante siglos. Y con esta delicada atmósfera, el calor no se mantiene cerca de la superficie, de ahí que las temperaturas varíen enormemente. Las temperaturas diurnas en el lado soleado de la luna alcanzan 134 ºC; en el lado oscuro, tenemos unas heladas de -153 ºC.

https://science.nasa.gov/earth/10-cosas-lo-que-aprendemos-sobre-la-tierra-estudiando-la-luna/?fbclid=IwZXh0bgNhZW0CMTAAAR3qnhF_-8DNz4UiT4O3QfpuTubTgefawuwl3tFuut7JBmESHzzOChWgHUk_aem__7RkPk2DEsH6-nLfQmX3MA