Los gobiernos de España, Noruega e Irlanda han oficializado el reconocimiento de Palestina como un Estado independiente y soberano. Esta decisión, anunciada la semana pasada, ha generado tensiones con Israel en los últimos días.En una acción coordinada, los tres países establecerán relaciones diplomáticas plenas con Palestina. El ejecutivo de Dublín, en coalición entre democristianos, centristas y verdes, aprobó hoy un memorando para dar efecto a esta decisión diplomática.
En España, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, lideró la reunión de su gabinete que formalmente aprobó el reconocimiento de Palestina como Estado. Sánchez reiteró que la solución al conflicto pasa por la existencia de dos Estados, Israel y Palestina, con Jerusalén Este como capital y con la Autoridad Nacional Palestina al frente.El presidente español enfatizó que este reconocimiento no implica un cambio en las fronteras más allá de lo establecido en resoluciones de la ONU y en la postura mantenida por la Unión Europea. Además, manifestó el rechazo rotundo de España al grupo terrorista Hamás y aseguró que esta decisión «no va contra nadie» y «menos contra Israel», país considerado amigo por España.
Por su parte, Noruega destacó la importancia de este reconocimiento en su relación bilateral con las autoridades palestinas, siendo uno de los mayores defensores de un Estado palestino durante más de 30 años mientras Simon Harris, primer ministro irlandés declaró que su país designará embajador ante el Estado palestino e insistió en sus declaraciones en un llamado a Israel para «detener la catástrofe humanitaria».
Israel criticó la medida diplomática, pero se señala que esta no tendrá repercusiones inmediatas en la guerra en Gaza. El ministro de Exteriores de Israel, Israel Katz, expresó su desaprobación en redes sociales, acusando al gobierno de Sánchez de ser cómplice de incitación al genocidio contra los judíos y de crímenes de guerra.
Las señales por la paz siguen llegando desde diferentes rincones del planeta.