El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador CONAIE Leonidas Iza denunció que: “El Gobierno de Daniel Noboa tiene intereses mineros en Ecuador”. El dirigente aseguró que Daniel Noboa fue a negociar por los intereses que tiene su familia en la Adventus Mining Corporation a Canadá.
La Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador informó que presentó una demanda de inconstitucionalidad contra el acuerdo ministerial emitido por el Gobierno para profundizar la actividad minera. El presidente de la CONAIE realizó en varios medios la denuncia de que el Grupo Nobis, perteneciente a la familia del presidente Daniel Noboa, participa de la actividad extractiva en el país. Iza indicó que desde antes de que Daniel Noboa estuviera presidiendo el país, el capital de su familia participaba en proyectos mineros en Curipamba, Pijilí y Santiago en Ecuador.
El 4 y 5 de marzo el presidente Daniel Noboa se encontraba en Canadá en una feria minera, donde estampó su firma en por lo menos seis contratos mineros. Ese mismo día organizaciones indígenas y ambientalistas del Ecuador se manifestaron en contra de esta política del presidente Noboa. El 7 de marzo dirigentes del Movimiento Indígena y Campesino de Cotopaxi (MICC) denunciaron la aparición de paramilitares hostigando a la población rural del Cantón Sigchos de la provincia de Cotopaxi, y más específicamente en la zona de Palo Quemado y las Pampas.
Desde ese momento en las redes sociales de la CONAIE se puede ver la seguidilla diaria de ataques a la población civil, e incluso es tal el asedio que durante la noche del 10 de marzo pobladores de Sigchos denunciaron la presencia de centenares de paramilitares fuertemente armados que irrumpieron en domicilios de los comuneros de San Pablo, para amedrentar a las familias que se oponen al proyecto La Plata.
Ayer varios pobladores fueron heridos debido a la represión. En las redes sociales de CONAIE se pueden ver los videos de la represión de la policía del ecuador, la fuerza pública puesta al servicio a la minera canadiense Ático en la parroquia Las Pampas. “El extractivismo ensucia la tierra con la sangre de los campesinos”, denuncian la organización indígena. Los pobladores defienden su territorio y denuncian que se está vulnerando la ley ya que no existió consulta previa, que es un derecho garantizado incluso por organismos internacionales.
El Frente Nacional Antiminero informó que como consecuencia del asedio que la población viene sufriendo, hay 15 personas heridas que fueron atacadas con balas de goma, perdigones y bombas lacrimógenas.
De ellos, siete están graves con quemaduras en sus rostros, brazos y piernas, precisó el Frente, que responsabilizó al Gobierno de Noboa por la vida de los afectados.
Criminalización a comuneros
El presidente del MICC, Alex Toapanta, criticó el inicio de acciones legales en contra de 70 comuneros de Palo Quemado, acusados de terrorismo. También señaló que el gobierno nacional no ha informado a la población, ha identificado el territorio y quiere justificar con un plebiscito: «Sin realizar la consulta libre e informada, el Gobierno Nacional concesionó más de 90 mil hectáreas de tierra en la provincia de Cotopaxi, no solo en Las Pampas y en Palo Quemado, sino también, en los cantones Sigchos, La Maná, Pangua y Pujilí para la minería», denunció ayer Toapanta.
Pero a pesar de esta criminalización el pueblo sigue luchando, hoy hubo una masiva movilización en la zona en rechazo a la falsa consulta ambiental impuesta con violencia por el Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica de Ecuador, en complicidad de Policía Nacional del Ecuador y Fuerzas Armadas del Ecuador, los comunarios denuncian que no los dejan participar de dicha consulta por eso denuncian que es “falsa”.
En el territorio se encuentra parte de la dirigencia de la CONAIE apoyando a los pobladores, y denuncian que la represión de ayer: “ha tenido un impacto devastador Palo Quemado, incluyendo niñas, adolescentes y adultos mayores. «La Policía y militares nos lanzaron bombas, nos persiguieron como si fuéramos delincuentes, pero a los delincuentes no les pueden seguir así, les tienen miedo, pero a la gente campesina que lucha por la tierra sí nos atacan», testimonió una niña mientras abrazaba a otra jovencita y lloraba.