En Londres se está llevando a cabo una audiencia de apelación de importancia crítica para el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, en el Tribunal Superior de Justicia del Reino Unido. Esta podría ser la última oportunidad del fundador de WikiLeaks para evitar ser extraditado a Estados Unidos. Assange, que ha estado detenido desde 2019 en la prisión de alta seguridad de Belmarsh, en Londres, fue acusado en virtud de la Ley de Espionaje de Estados Unidos y enfrenta una condena de hasta 175 años de prisión por publicar documentos clasificados que expusieron los crímenes de guerra que el país norteamericano cometió en Irak y Afganistán.
La esposa de Julian, Stella Assange, ha calificado la situación como una cuestión de vida o muerte. Antes de dirigirse al tribunal, Stella Assange se dirigió a los simpatizantes de su marido que se encontraban congregados frente al edificio donde se lleva a cabo la audiencia de dos días.
Stella Assange: “No hay posibilidad de un juicio justo si Julian es extraditado a Estados Unidos. Él nunca debería ser extraditado a Estados Unidos. [Allí,] él nunca estaría a salvo. Estados Unidos conspiró para asesinar a mi marido. Él está siendo acusado de ejercer el periodismo. Este caso constituye una admisión por parte de Estados Unidos de que ahora ellos criminalizan el periodismo de investigación. Este es un ataque a todos los periodistas de todo el mundo. Este es un ataque a la verdad y es un ataque al derecho de la sociedad a la información. Julián es un preso político, y su vida corre peligro. Lo que le pasó a Navalny le puede pasar a Julián. Él tiene que ser liberado. Esta farsa tiene que terminar”.