Del 26 de enero al 1 de febrero tuvo lugar en el Millenium Hall de Addís Abeba, capital etíope la primera Exposición Pastoral de África Oriental de la que participaron más de 20 mil asistentes y contó con 200 panelistas y representantes en los grupos de trabajo sobre las dificultades y desafíos que viven los pastores africanos.

Organizado por el Ministerio de Irrigación y Tierras Bajas de Etiopía junto a la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD), que integran ocho países del cuerno de África, el valle del Nilo y los Grandes Lagos: Etiopía, Djibouti, Eritrea, Somalia, Uganda, Kenya, Sudán y Sudán del Sur.

Dereje Wakjira, el director de la IGAD para Áreas pastorales y Desarrollo Ganadero reconoció la importancia de respaldar a este sector de la economía local, asimismo destacó el potencial para la defensa de la paz y el acceso a desarrollo sostenible en las zonas pastorales.

“Es importante llamar la atención de los responsables políticos y de otras personas sobre el hecho de que tenemos una gran cantidad de ganado en esta región. Necesitamos apoyar a través de políticas o diferentes medios para que estos activos ayuden a la gente sobre el terreno, pero también a construir la economía de los países”, citó a Wakjira Prensa Latina.

En el evento se habló del protocolo de transhumancia para una movilidad segura y ordenada, además de evaluar los avances del Programa Resiliencia a la Sequía que fue creado en 2013 y sigue de preocupante actualidad.

Se considera que las comunidades de pastores aportan más del 20 % del Producto Interior Bruto de la región y que alcanzan los 40 millones de miembros diseminados en los distintos países. Estos grupos trabajan de manera transfronteriza por lo que para mantener su sustento se debe trabajar articuladamente entre países, incluso aquellos en los que hay enfrentamientos. Se estima que pastorean 500 millones de cabezas de ganado.